Cartas

Un suceso anunciado

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Ahora que se habla tanto de las buenas relaciones entre países, para que éstas fructifiquen, hay que respetarse mutuamente, y ésto es precisamente lo que no hace Marruecos con España. Pienso que España es culpable de lo que sucede en el Sahara Occidental, no sólo por el asunto de la falta de documentación de Aminatu, que según parece ahora está en los tribunales, sino porque hemos pasado de apoyarlos a no hacerlo. En materia de emigración Europa tiene que hacer un mayor esfuerzo y no dejar a los países del sur, entre los que se encuentra España, sin ayuda. El pueblo entiende las cosas perfectamente y hay que decirle la verdad, que no es otra que España por distintos intereses se ha olvidado de la justicia, de su pasado y del pueblo saharaui.

Confiemos que la crítica situación de esta defensora saharaui de los derechos humanos, que tantos años ha pasado en las cárceles marroquíes, se resuelva satisfactoriament,e porque pienso que en ello va un poco de nuestra dignidad. Esperemos igualmente que España nunca más vuelva a deportar a ningún indocumentado a cualquier país, como Marruecos, donde los derechos humanos brillan por su ausencia.