La rehabilitación de viviendas beneficiará a casi 18.000 jerezanos

Un total de 25.000 vecinos se están beneficiando ya o se van a beneficiar de la revolución que en las numerosas barriadas de Jerez está suponiendo la rehabilitación de viviendas: cubiertas, forjados, interiores, reparación de cornisas, instalación de ascensores... Eran muchas las zonas donde las casas se caían, literalmente, a pedazos, y que ahora se están convirtiendo en remozados lugares para vivir con unas condiciones óptimas.

«Es una labor que está haciendo la Junta de modo coordinado con el Ayuntamiento y que se ha impulsado hace dos años. Era algo que la antigua GMU (Gerencia de Urbanismo) tenía frenado por las diferentes trabas que se ponían», explica el delegado de Vivienda e Infraestructuras, Antonio Fernández Ortega.

Se refiere el responsable municipal al programa de rehabilitación de edificios donde están comprendidas tanto las viviendas privadas (La Asunción, El Calvario, Icovesa, Juan XXIII, La Alegría, La Constancia, La Granja, La Plata, San Benito, San Telmo, Santo Tomás y Fábrica de Botellas) como de la Junta (la UVA, San Benito, La Constitución, San Joaquín, La Serrana, Teodoro Molina y zona rural). En total, 6.076 pisos que, a un ratio de 2,6 personas por hogar, hace que sean 15.708 los beneficiados.

Si a ello se suma el centro histórico -comprendido en el área de rehabilitación concertada-, y el hecho de que «en realidad el número de miembros por cada familia es mucho mayor que ese ratio en las citadas barriadas», según el delegado, la cifra global es bastante más alta.

«Tirando por lo bajo, unas 25.000 personas», asegura Antonio Fernández. Sólo en el 30% de los casos las actuaciones ya están terminadas. Es decir, que son casi 18.000 los jerezanos que se van a beneficiar en un futuro más próximo o lejano de estos planes de rehabilitación.

Subvenciones

Lo máximo que los vecinos tienen que abonar es el 25%, pero en algunas ocasiones la Administración autonómica paga hasta el cien por cien de las obras.

El delegado habla de casos «emblemáticos» como La Constancia (que afecta a más de 1.000 vecinos) y La Plata, que «con más de 40 años, había que rehabilitar».

Reconoce que «todavía queda mucho por hacer», pero no oculta su satisfacción al haber «reactivado» estas actuaciones «fruto de la coordinación».

«Lo más importantes -señala- es que si estos trabajos no se estuvieran haciendo, todas estas barriadas estarían muy deterioradas». A las intervenciones señaladas se unen en algunos casos las mejoras que implica el Plan E, lo que permite una remodelación bastante más amplia con arreglo de calles, alumbrado público, etc.

Capítulo aparte es el de las actuaciones especiales, que afectan a más de 500 viviendas en San Juan de Dios, Cerrofruto y la barriada rural de El Portal. En el primero de los casos, se han derribado ya algunos bloques y varios residentes están residiendo en edificios completamente nuevos. Estas actuaciones de remodelación integral las lleva a cabo el propio Ayuntamiento.