El paro aumenta en Jerez tres veces más que en el resto de Andalucía

El mes de noviembre ha sido nefasto para el empleo en el conjunto del país, para Andalucía y para la provincia de Cádiz. Pero una de las localidades donde la lacra del desempleo ha golpeado con más fuerza ha sido en Jerez, en la que durante el mes de noviembre se registraron 443 nuevos parados que elevan la cifra total de los inscritos en las oficinas del Servicio Andaluz de Empleo (SAE) en la ciudad a 27.970 personas.

Si por sí solos los datos del paro en la localidad no fueran suficientemente preocupantes, la comparación con el resto de tendencias aún dejan peor sabor de boca. Y es que en la provincia la media del aumento del desempleo ha sido de un 1,5%, por lo que la subida en Jerez, que ha sido del 1,6%, está por encima. Y aún más sangrante resulta enfrentar los valores locales con la tasa andaluza, ya que en este caso el número de nuevos demandantes de empleo es tres veces más alto que en la región, donde la variación mensual fue sólo un 0,5% más.

Como no podía ser de otra manera, el sector servicios jerezano es el que vuelve a llevarse la palma en lo que a destrucción de puestos de trabajo se refiere, ya que engordó las listas del SAE con 237 personas más. Eso sí, no es la única actividad que arrojó malas noticias durante el pasado mes, ya que tampoco la construcción o la industria tuvieron un buen comportamiento.

Así, el sector del ladrillo sumó 66 parados más, exactamente la misma cifra que la industria, donde sin duda ya se ha empezado a notar el descenso en las contrataciones temporales que tenían como destino la fábrica de botellas de Vicasa, que ya echó el cierre y que durante el mes de noviembre aligeró su actividad.

Otro aumento importante de las cifras del desempleo llegó de la mano de los inscritos que no tenían empleo anterior, un total de 83 personas más que se suman a la casi imposible tarea de encontrar un trabajo en Jerez.

La agricultura es el único segmento que dio alguna alegría al mercado laboral jerezano, y no fue excesiva porque apenas redujo el paro agrario en nueve personas.

En cuanto al análisis por sexos, de nuevo fueron los hombres los que sufrieron de forma más virulenta el golpe del paro, con 270 nuevos desempleados frente a las 173 desempleadas.