Los empleados de Vicasa tendrán que ratificar hoy el preacuerdo

Tras las tensiones del sábado, el día en el que los trabajadores de Vicasa volvieron a echarse a la calle para reclamar un acuerdo al que finalmente se llegó a última hora de la tarde, la jornada de ayer fue el momento para la resaca tranquila y para que los empleados pudieran analizar lo que habían logrado sus representantes sindicales durante la negociación con la empresa.

Muchos de los que pasaron la noche acampados en la fábrica se levantaron ayer por la mañana y se marcharon a casa con sus familias, sin duda para analizar juntos las condiciones que se han pactado entre trabajadores y la multinacional para ejecutar el cierre de la fábrica de botellas de Jerez, y que los representantes de la plantilla calificaron de «inmejorable».

Y es que todos los que se verán afectados por este acuerdo tendrán que reunirse hoy a las 17 horas en asamblea en la fábrica para ratificar el preacuerdo al que llegó el comité de empresa con su presidente, Antonio Alba, a la cabeza. Los que han cumplido 55 años y que se prejubilarán, los 40 empleados que seguirán trabajando en el nuevo centro logístico, los 26 que tendrán que trasladarse a la planta de producción de Alcalá de Guadaira -la mitad de los cuales se incorporará inmediatamente y el resto más adelante cuando abra el horno que está previsto en Sevilla para 2011 -. Todos darán hoy su voto para que, si el resultado es favorable, se pueda rubricar el acuerdo e informar a la autoridad laboral, la Delegación de Empleo.

Buenas condiciones

Alba, que curiosamente es el empleado de más edad de la fábrica y que por lo tanto es uno de los que se prejubilará, ya dejó claro en la reunión con sus compañeros del pasado sábado que su intención era dar el «sí» al acuerdo.

En este sentido, el presidente del comité hace hincapié en que «lo que se ha pactado es un documento muy cercano a lo que nosotros pedíamos desde el principio, sobre todo porque se ha logrado elevar a 40 el número de personas que no tendrán que marcharse de Jerez para trabajar».

Del mismo modo, Alba enfatizó que «también los que se quedan a la espera del traslado a Sevilla y los que se prejubilan van a cobrar el 100% de su sueldo, y los que se marchen ahora a Alcalá de Guadaira cobrarán un plus mensual de 250 euros».

Sin embargo, el líder de los trabajadores no pudo ocultar que su sensación es «agridulce», porque aunque se han logrado las mejores condiciones «nadie puede olvidar que no se ha conseguido el objetivo de mantener abierta la fábrica de Jerez, y esa tristeza empaña la alegría por el acuerdo con el que se ha cerrado el ERE».