«Griñán lleva el 'maillot' amarillo en el PSOE-A y Chaves pedalea para que gane»

Trasmite serenidad, una actitud codiciada en política, al menos en la buena política. Y desde esa serenidad nace una respuesta con la que quiere poner fin a un debate que ella misma califica de ficticio: José Antonio Griñán es el actual líder de esta formación y todos los demás, incluido Manuel Chaves, secretario general del PSOE-A, trabajan para que Griñán llegue el primero a la meta del 2012. Y estas palabras son importantes en boca de una consejera de la Junta de Andalucía; pero es que Mar Moreno, además, es secretaria de relaciones Institucionales y Política Autonómica del PSOE federal, lo que la convierte, desde un punto de vista orgánico, en la número cuatro del PSOE federal.

-Vaya lío con la bicefalia en la dirección andaluza del PSOE. ¿De verdad existe ese debate?

-En mi opinión, todo el PSOE tiene absolutamente claro que Pepe Griñán lleva el maillot amarillo y todos los demás pedaleamos para que gane él y gane Andalucía.

-¿Y cómo queda entonces la figura de Manuel Chaves como secretario general del PSOE-A?

-Manuel Chaves es el primero que pedalea, por seguir con el símil del ciclismo, para que gane Griñán y gane Andalucía.

-¿Qué quiso decir o por qué dijo José Antonio Griñán que él era el líder del PSOE-A cuando, y hasta que se celebre un congreso extraordinario, el secretario general andaluz sigue siendo Manuel Chaves?

-Pues yo creo que quiso decir, exactamente, que lleva el maillot amarillo.

-Resulta obvio que usted no tiene dudas de que el maillot amarillo, como ha denominado a José Antonio Griñán, sea el candidato del PSOE a la Presidencia de la Junta en 2012.

-No tengo dudas de que Pepe Griñán será el candidato y estoy convencida de que llegará el primero a la meta.

-¿Su nombramiento como consejera de Educación en Andalucía le ha obligado a dar un paso atrás en sus obligaciones orgánicas como número cuatro del PSOE federal?

-Sigo estando en primera línea del partido. Estuve un año con dedicación exclusiva en la ejecutiva federal del PSOE. Ahora no, ahora compagino mi responsabilidad como consejera de Educación de la Junta de Andalucía con mi cargo orgánico, como lo hacen otros ministros, secretarios de estado y consejeros con responsabilidad en la ejecutiva federal o en la regional. Pero es cierto que ahora mi principal ocupación y a lo que dedico una mayor intensidad son las tareas de gobierno; y las tareas de partido son un complemento, algo que por otro lado es muy común.

-¿Cree usted que está calando en la sociedad andaluza el discurso del PP sobre la responsabilidad del PSOE en que España y Andalucía no esté saliendo de la crisis al mismo ritmo que otras regiones?

-Resulta muy fácil para el PP poner el foco en los problemas en unos tiempos que son especialmente delicados. Pero creo que cuando ganemos perspectiva, la ciudadanía va a saber valorar lo difícil que es gobernar en tiempo de crisis y hacerlo con una amplia protección social, sin dejar a nadie en la cuneta y con unas ideas muy claras sobre la necesidad de ir hacia un nuevo sistema productivo. Las acciones de gobierno de Zapatero o de Pepe Griñán van a brillar cuando pase un poco de tiempo. Ahora mismo, con el agobio de la crisis, es muy difícil valorar lo positivo que se está haciendo. Estoy convencida de que en poco tiempo, la salida de la crisis va iluminar notablemente el esfuerzo que ha hecho el Gobierno de España y el de la Junta de Andalucía para gobernar bien en tiempos de crisis.

-Durante la campaña electoral en las autonómicas de 2008, Manuel Chaves comentó que a él le gustaría que su sustituta al frente de Andalucía fuese una mujer socialista, aunque finalmente se decantó por Griñán. Su nombre, como suele pasar en los últimos años en este tipo de cábalas, saltó a primera línea. ¿Este tipo de conjeturas le perjudican?

-Llevo muchos años conviviendo con este tipo de comentarios con mucha naturalidad, forman parte de mi biografía. Yo sólo he recibido del PSOE confianza y oportunidades políticas.

-¿Será o debería ser 2016 el año en que, definitivamente, una andaluza encabece la candidatura socialista a la Junta?

-¡Ya vamos por el 2016! (sonríe). A mí, de aquí al año 2016, a mí lo único que me interesa es que Andalucía progrese y que las andaluzas y los andaluces vivan cada vez mejor. Lo demás es política ficción.

-¿Los casos de presunta corrupción que afectan a dirigentes populares acabarán pasando factura al PP en las urnas?

-Hay que diferenciar dos cuestiones. La corrupción siempre es negativa para cualquier partido al que le salga un caso, porque siempre resta. En el caso del PP, a mí me ha molestado mucho la actitud con la que se han enfrentado a la corrupción. La cúpula del PP se ha pasado muchos meses acusando a fiscales, jueces y policías de estar persiguiendo al Partido Popular. Y eso es mentira, porque la justicia interviene siempre, sin fijarse en el partido al que pertenecen los presuntos corruptos. Y eso, desgraciadamente, ha quedado demostrado en la última semana. Por lo tanto, el PP ha tenido dos problemas: uno, la corrupción y dos, cómo se ha comportado con la corrupción. Espero que todo eso no le salga gratis.