La imputada por la estafa Red Casa acumula una denuncia más

La calma no siempre llega después de la tempestad y los problemas judiciales derivados de la Operación Burbuja se le siguen acumulando a Ana S. G, imputada por una estafa inmobiliaria que en esencia consistía en revender a distintos compradores un mismo inmueble, apoderándose de las señales que entregaban las víctimas y sin cerrar nunca los contratos de compra-venta, según las investigaciones llevadas a cabo por el grupo III de la Udyco.

Cuatro meses después de su salida de prisión, Ana S. G. volvió a ser denunciada por una de sus supuestas víctimas. Según confirmaron fuentes policiales, la denunciante, que consta en el procedimiento que se instruye por la estafa Red Casa como una de las afectadas, le reclamó el pasado 5 de octubre las propiedades que había dejado en un piso que le alquiló antes de que estallara la operación policial y fuera arrestada; unos bienes que no ha podido recuperar.

La denuncia que llegó a la Comisaría Provincial explica que Ana S. G. le alquiló a la denunciante uno de los pisos que forman parte de la trama estafadora. Al poco tiempo de entrar a vivir, los problemas de habitabilidad obligaron a la inquilina a salir del inmueble, acordando con la imputada una compensación por realojarse de forma eventual en otra vivienda hasta que concluyeran las obras de reforma.

Cambio de cerradura

Pero cuando Ana S. G. fue arrestada y la inquilina quiso recuperar sus pertenencias -muebles y enseres personales- se encontró que había cambiado la cerradura. Tuvo que esperar durante semanas hasta que un familiar de la imputada le abrió la puerta de la que había sido su casa. Según confirmaron las mismas fuentes, en el interior del piso, ubicado en el casco antiguo, faltaban la mayoría de los bienes de la víctima, que interpuso una denuncia.

Efectivos del grupo de Delincuencia Urbana citaron en sede policial a Ana S. G, donde la interrogaron por este episodio. La imputada, acompañada por su letrado, alegó que este asunto estaba ligado a la causa que se está instruyendo en el juzgado nº 2 de Cádiz. Por lo que la Policía remitió la documentación a la autoridad judicial para que la incluya en el procedimiento.

Además de sus propiedades, la inquilina ya denunció a Ana S. G. por incumplir el acuerdo que habían suscrito al salir de la vivienda que acababa de arrendar; después sabría que sobre ese mismo inmueble pesaban dos embargos y que formaba parte supuestamente de la trama estafadora.

La inquilina le había pagado a Ana S. G. 12.000 euros en concepto de alquiler por dos años. Pagó por adelantado para beneficiarse de un rebaja que le había ofertado la imputada. Cuando tuvo que abandonar el piso para que le hicieran reformas, la casera se comprometió supuestamente a compensarle todos los meses con una cantidad mientras duraban los trabajos. Sólo recibió una mensualidad.