Selu García Cossío cuenta con una capacidad innata para hacer reír. / MIGUEL GÓMEZ
CÁDIZ

Un peluquero en el Olimpo de la fiesta

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S elu García Cossío es probablemente una de las personas más conocidas de la ciudad. Su faceta carnavalesca le ha colocado siempre en un primer plano y le ha dado una fama que tiene su origen en su capacidad innata para hacer reír. Su contribución a la fiesta no podría resumirse con palabras porque no sólo se limita a una cuestión de trayectoria. El chirigotero es una magnífica excepción en la fiesta porque desde muy pronto aprovechó su gran ingenio para vivir del Carnaval, algo que no le avergüenza en absoluto, como le ocurre a muchos de sus compañeros, ya que lo considera un trabajo de primer nivel. Es su gran dedicación, la que compagina con su labor de guionista para productoras y artistas de renombre como Los Morancos, con quienes lleva triunfando en la televisión desde hace más de quince años.

Atrás queda su profesión de peluquero, la única para la que se preparó y la que no le ha dado de comer precisamente. Tampoco su trabajo de cartero en Correos durante algunos años le permitió retirarse de las tablas, afortunadamente para los que le siguen y disfrutan cuando lo ven actuar sobre un escenario. Eso sí, Selu tiene un grato recuerdo de esta etapa profesional, que incluso le sirvió para después crear a muchos de los personajes de sus chirigotas.

José Luis García Cossío ha pasado de ser uno de los miles de nombres que conforman las listas del paro, a ser chirigotero de profesión. Los éxitos de sus composiciones estrictamente carnavalescas le permiten actuar por toda España durante todo el año y le han permitido obtener todo tipo de reconocimientos y elogios más allá del puente Carranza.

El gran descubrimiento de Selu García Cossío como carnavalero se produjo hace ya casi 30 años, cuando se atrevió a pisar un escenario por primera vez. Curiosamente fue en una comparsa donde debutó como carnavalero, donde permaneció durante un largo periodo junto a autores de la talla de Enrique Villegas, Pedro Romero o Antonio Busto. Desde entonces y hasta la actualidad han transcurrido 28 carnavales y sólo se ha ausentado del concurso en dos ocasiones y por causas justificadas. El primer alto en el camino fue en 1983, cuando el autor tuvo que cumplir el servicio militar, que por entonces era obligatorio, mientras que en el segundo caso, en 1999, tomó la decisión de no participar en el certamen para compartir con su mujer el nacimiento de su primer hijo. Sin embargo, ha sido en chirigotas donde ha alcanzado su gran éxito con cuatro primeros premios: Los borrachos, Los ricos, Los Lacios y Lo que diga mi mujer.

Todos estos logros han permitido que Selu entre, a partir del 13 de febrero, en el Olimpo de la fiesta como pregonero del Carnaval. Un premio más que merecido.