Arenas cree «indigno e ilegal» el canje de la 'deuda histórica' por anticipos a cuenta del Gobierno

El presidente del PP-A, Javier Arenas , aseguró ayer que la posibilidad de descontar la deuda de 1.000 millones que mantiene la Comunidad con el Estado en concepto de anticipos a cuenta de la deuda histórica es «ilegal e indigna» al tiempo que estimó «vergonzosa» la actitud mostrada por el jefe del Gobierno andaluz, José Antonio Griñán, «inédita en la historia de nuestra autonomía».

En declaraciones a Europa Press, Arenas vinculó la formula apuntada ayer por la consejera de Economía y Hacienda, Carmen Aguayo, a una «conspiración contra Andalucía y la deuda histórica» en la que señaló como «inspiradores» al vicepresidente tercero del Gobierno, Manuel Chaves, y a Griñán, y como «brazo ejecutor» a la titular andaluza del ramo.

El líder del PP-A acusó, en esta línea, al jefe del Ejecutivo andaluz de haberse «cargado» en consenso parlamentario alcanzado por las distintas fuerzas políticas en torno al Estatuto de Autonomía, al tiempo que tildó de «sencillamente increíble» la citada posibilidad que, «a buen seguro-ahondó- está haciendo que anteriores responsables de la Junta se estén llevando las manos a la cabeza».

Al Parlamento

Arenas avanzó que su grupo exigirá «con la mayor de las fortalezas» durante el próximo pleno del Parlamento andaluz que se salde a través de las cuentas generales tanto del Estado como de la Comunidad Autónoma la que llamó la «otra deuda histórica», en referencia a las inversiones que «aparecen presupuestadas pero que finalmente no se ejecutan».

En declaraciones a los periodistas tras mantener una reunión con representantes del sector hortofrutícola en Almería, Arenas reclamó «el mismo trato» para Andalucía que se da a Cataluña, donde «las inversiones que no se ejecutan quedan incorporadas y sumadas» en sucesivos ejercicios presupuestarios mientras que en «nuestra región -detalló- ese montante económico desaparece para siempre»

Tras reiterar que los Presupuestos Generales del Estado (PGE) de 2010 suponen un «autentico desastre» para la Comunidad autónoma, a la que «sólo pueden traer más paro y más crisis», el líder del PP andaluz se refirió a la citada «otra deuda histórica» como «un gran engaño» y «una tomadura de pelo monumental» para los andaluces.