Una autovía con pocos siniestros

El ocurrido ayer en la autovía de Jerez-Los Barrios se ha convertido en el accidente de tráfico más grave en lo que va de año en toda la provincia de Cádiz. Se da la circunstancia, curiosamente, de que se trata de una carretera por lo general tranquila que escapa de la catalogación de puntos negros llevada a cabo por la Dirección General de Tráfico. En este sentido, la palma se la lleva la Nacional IV, que sólo a la altura de Jerez cuenta con tres zonas de estas características, propensas a los siniestros.

Uno de los requisitos para que se registre un punto negro es que el tramo en cuestión presente un número considerable de curvas, lo que en el caso de la A-381 a su paso por el municipio jerezano no se cumple. Por todo ello, y dado que en el accidente ocurrido ayer no intervino ningún otro vehículo, una de las hipótesis que la Guardia Civil maneja con más fuerza es la de la distracción al volante, lo que pudo desencadenar la tragedia.