La Fiscalía reclama al Supremo que interrogue ya como imputado al tesorero del PP

La Fiscalía reclamó ayer al Tribunal Supremo que cite ya a declarar como imputado por los delitos de cohecho y contra la Hacienda Pública al senador y tesorero del PP, Luis Bárcenas, a quien el alto tribunal investiga desde el pasado 24 de junio, cuando detectó «indicios suficientes» de que pudo recibir entre 1997 y 2004 más de un millón de euros en pagos sin justificar de empresas de la trama de corrupción Gürtel. El Ministerio Público, en el mismo escrito, pide que se interrogue con la misma urgencia al diputado nacional popular y ex vicepresidente de la Junta de Castilla y León Jesús Merino, al que el juez instructor, Francisco Monterde, imputa un delito de cohecho por la sospecha de que ingresó al menos 220.000 euros de la misma red empresarial.

El fiscal indica en su reclamación que no tiene problema alguno en que Monterde elija cualquiera de las dos fórmulas que en este caso la ley pone en su mano para las citaciones, siempre y cuando las ponga en marcha de inmediato. La primera opción es que Monterde eleve al Congreso y al Senado sendos suplicatorios para que le autoricen a poder dirigir una investigación criminal e interrogar a los dos parlamentarios, que como aforados tienen inmunidad. Este proceso tasado, que en cualquier momento duraría más de un mes, ahora, dado que en junio terminó el período de sesiones en ambas cámaras, retrasaría los interrogatorios hasta el otoño.

Declaración voluntaria

La segunda opción es que el tribunal autorice a ambos aforados a prestar declaración voluntaria ante el instructor -con renuncia al suplicatorio-, extremo al que hace varios días dijeron estar dispuestos los dos políticos investigados. La segunda fórmula tiene la ventaja de que los interrogatorios podrían realizarse de inmediato.

El Ministerio Público, además de las declaraciones, solicita a Monterde que, para activar la instrucción que dirige, reclame al Tribunal Superior de Justicia de Madrid todas las diligencias que afectan a Bárcenas y a Merino y que esta institución practicó mientras realizaba la instrucción de todo el caso Gürtel, antes de que hace un mes elevase al Supremo la causa contra los dos aforados.

Por último, también solicita al alto tribunal que decrete el secreto de sumario de la instrucción de este caso.