Los vascos desconfían del nuevo Gobierno de López

La mayoría de los vascos, un 61%, está en desacuerdo con el pacto de investidura entre el PSE-EE y el PP, a la vez que demandan al PNV que ejerza una oposición constructiva, según las datos del Euskobarómetro, el estudio sociológico semestral que realiza la Universidad del PaísVasco.

Las principales preocupaciones de los vascos siguen siendo, este semestre con mayor diferencia, el paro y la crisis económica, que "agobia" a seis de cada diez hogares vascos. El terrorismo mantiene el tercer lugar en esta lista de preocupaciones.

En cuanto al nuevo Gobierno vasco presidido por Patxi López, el 65% de los encuestados, la mayoría de ellos nacionalistas, según ha precisado el director del Euskobarómetro, Francisco Llera, ha mostrado su "desconfianza" hacia el Ejecutivo y un 58% se ha mostrado "insatisfecho" con los resultados de las elecciones vascas del pasado 1 de marzo. Preguntados sobre una posible alianza entre el PNV y el PSE, la mayoría ve alejarse esta probabilidad, aunque admiten que seguirían otorgándole su apoyo.

Exclusión de la izquierda abertzale

La sociedad vasca identifica además al PSE-EE y al PP como los principales beneficiados por la exclusión electoral de la izquierda abertzale que no condena el terrorismo de ETA, mientras que sitúan al PNV como el gran perjudicado.

Los vascos encuestados se muestran divididos entre partidarios (43%) y detractores (35%) de la utilización o no de la ilegalización y la exclusión electoral de los partidos herederos de la ilegalizada Batasuna para cuestionar la legitimidad de la nueva mayoría del Gobierno.

Como suele ser habitual, ocho de cada diez ciudadanos tenían tomada su decisión de voto antes de la campaña y sólo uno de cada diez asegura haber dudado y decidido el mismo día de las elecciones. La investigación establece además el distinto nivel de fidelidad de cada electorado, que oscila entre el mínimo de EB y EHAK -en torno a un 60%- y el máximo de Aralar (alrededor del 90%) y de los socialistas (por encima del 80%).

Crispación y crisis

A pesar del cambio de mayoría en el País Vasco, no se perciben síntomas claros de mejora en el clima político. De hecho, escepticismo y pesimismo se reparten las preferencias de nueva de cada diez vascos, incrementándose significativamente el pesimismo en el último semestre, tanto en el escenario político vasco (43%) como en el español (44%).

Sigue habiendo además una mayoría (53%) que piensa que las actuales divisiones entre los partidos generan tensión, discusiones y crispación. Entre las causas sitúan en primer lugar el desacuerdo entre nacionalistas y no nacionalistas (36%), mientras que el frente constitucionalista sigue ocupando la segunda posición para uno de cada diez vascos (10%), sobre todo nacionalistas. En tercer lugar, para algo menos de uno de cada diez lo es el frente nacionalista (6%), sobre todo entre los electores populares.

Por último, destaca que el 2009 está siendo un buen año para la gran mayoría de la ciudadanía vasca a pesar de estar sintiendo los efectos de la crisis y que el pesimismo y la desconfianza económicos alcanzan máximos históricos. Precisamente, se dispara la preocupación por el empleo (51%), con un avance de 30 puntos en el último año, que se refuerza como la principal preocupación de la ciudadanía vasca. Le sigue la situaicón económica (18%), la violencia y el terrorismo (9%) -que ha retrocedido 11 pintos-, las desigualdades sociales y bienestar (8%), la vivienda (5%), la situación política (3%), la inmigración, la seguridad o las drogas, entre otros.