Los etarras Jon Igor Solana y Harriet Iragi, durante el juicio por el asesinato de Martin Carpena. /Archivo
PERFIL

Igor Solana, miembro del 'comando Andalucía'

En 2001 intentó fugarse de la cárcel de Nanclares

BILBAO Actualizado: Guardar
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El miembro del comando Andalucía de ETA Igor Solana Matarrán está cumpliendo penas que suman doscientos años de cárcel por diversos atentados entre los que se incluyen tres asesinatos. Este etarra tiene experiencia en intentos de fuga ya que en 2001 intentó huir de la prisión alavesa de Nanclares descolgándose de un muro con una sábana.

Natural de Bilbao, de 34 años de edad, Solana formó, junto con Harriet Iragi, el comando Erraira o Andalucía que estuvo operativo entre los meses de julio y octubre del año 2000. Durante ese tiempo llevó a cabo siete atentados en Sevilla, dos en Granada y tres en Málaga.

Entre los atentados que perpetró, y por los que ha sido condenado, están los asesinados del concejal del PP de Málaga José María Martín Carpena, el fiscal jefe de Granada, Luis Portero, y el coronel médico Antonio Muñoz Cariñanos. Además, intentaron matar al dirigente socialista de Málaga José Asenjo, a dos suboficiales del Ejército y a un empleado civil del Ministerio de Defensa mediante la colocación de bombas-lapa en sus automóviles que no llegaron a estallar. Solana e Iragui fueron detenidos el 16 de octubre de 2000 en Sevilla después de cometer el asesinato del coronel Muñoz.

Fuga de película

Durante la noche del 17 al 18 de enero de 2001, el miembro de ETA intentó escapar de la prisión alavesa de Nanclares, a la que había sido trasladado temporalmente. Con una sierra logró cortar los barrotes de la celda. Por la ventana saltó entonces al patio del módulo cinco y desde ahí se introdujo en el gimnasio donde se apoderó de una espaldera que utilizó como escalera para trepar hasta un muro interior con una alambrada. Se protegió de los alambres con una manta y cuando se disponía a descolgarse con sábanas anudadas fue sorprendido por los vigilantes que se habían acercado al escuchar ruidos.

Se da la circunstancia de que cuando fue capturado, en el 2000, la policía registró su vivienda donde encontraron planos y documentos de la prisión alavesa. Desde su encarcelamiento ha pasado por las prisiones de Valdemoro, Nanclares, Burgos, Huelva, Puerto-1, Granada y Valencia, en la que se encuentra desde el pasado mes de febrero. En Huelva ha permanecido durante la mayor parte del tiempo, la última vez desde noviembre de 2008 hasta su traslado a Valencia, en febrero pasado.