El oro vuelve a viajar a La Isla

Los chaparrones que visitaron la provincia a primera hora de la tarde aguardaron a que la tradicional Media Maratón Costa de La Luz tocara a su fin para hacer acto de presencia. Este año la prueba partía de Rota con destino Chipiona y sumaba 24 valiosas ediciones que le situaban a las puertas de unas esperadas bodas de plata deportivas. El primer contratiempo que tuvo que sortear la organización fue el cambio de horario de la madrugada, que hizo que las sábanas se le pegaran a los atletas más dormilones y obligó a los corredores más madrugadores a esperar en la roteña plaza de España a que el pelotón se formara.

De esta forma, la carrera comenzó con un leve retraso de 15 minutos sobre la hora prevista: las 9.30 horas. Por delante quedaba una intensa mañana de atletismo que llevó a casi 300 corredores a bordear la costa noroeste y que dejó imágenes de gran belleza a la altura de Costa Ballena, cuando la media maratón se fundió con un paisaje mucho más playero.

La mayor parte de los atletas destacaron el intenso viento de poniente que sopló en su contra y complicó cada uno de los 21.097 kilómetros que integraron el recorrido de la media maratón.

En la línea de meta, situada en el chipionero parque Blas Infante, aguardaban el paso de los corredores todo tipo de curiosos y aficionados. A primera hora, los alrededores del Blas Infante amanecieron desiertos, pero conforme se iban acercando los atletas el número de espectadores fue creciendo. El soleado día animó a los chipioneros a salir a la calle y éstos se unieron a los familiares de los corredores hasta superar el centenar.

Para sorpresa de todos el primero en atravesar la meta, en torno a las 11.00 horas, fue el atleta discapacitado Marco Antonio Baena, que llegó imparable en su silla de ruedas con un crono de 1:09:00. Al igual que el pasado año, Baena repitió el liderato en la categoría de silla de ruedas. El corredor de Los Palacios superó a la carrera a otros cinco compañeros de club, el Portufísico de Sevilla.

Tras Baena llegó el corredor jienense Miguel Ángel Mudarra, que con un tiempo de 1:11:21 se proclamó ganador en la categoría absoluta masculina. De esta forma, Mudarra, habitual en pruebas de montaña y miembro del Club de Hockey Alcalá, amortizaba su primera participación en la Media Maratón Costa de La Luz.

Poco después, con una marca de 1:22:22, culminaba la carrera la isleña Raquel López, procedente del Club Carmona Páez de San Fernando. López repitió ayer, por segundo año consecutivo, como campeona absoluta de la categoría femenina de la Media Maratón Costa de La Luz. La corredora cumplió holgadamente con las predicciones de todas las quinielas, que le señalaban a ella como máxima favorita.

Pasaje a Nueva York

Con estas victorias, los campeones podrán sumar valiosos puntos para conseguir su pase directo a la popular Maratón de Nueva York, ya que la Costa de La Luz es la única prueba de la provincia que forma parte del Circuito Andalucía en Nueva York, que asegura el dorsal a los cuatro mejores clasificados de cada categoría en la carrera neoyorquina. Sin ir más lejos, gracias a su triunfo en la pasada edición, Raquel López pudo competir en 2008 en la más prestigiosa de las maratones norteamericanas, donde firmó la tercera mejor marca española femenina.