AGENCIA DEL AGUA. Los servicios centrales de la Cuenca Atlántica se ubican, hasta ahora, en la carretera N-IV. / JUAN CARLOS CORCHADO
Jerez

La plantilla de la Agencia del Agua alerta del desmantelamiento de la sede jerezana

Exigen a las administraciones que den marcha atrás a la «inminente» desaparición del centro, ya que ello supondría la pérdida de más de un centenar de puestos de trabajo en la ciudad

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En marzo de 2006, la Junta creó en la ciudad la dirección general de la Cuenca Atlántica de la Agencia Andaluza del Agua (AAA), con el jerezano Juan Carlos Camas al frente. Este organismo, que se ha hecho cargo desde entonces y hasta hoy de la gestión del agua de todos los ríos andaluces que vierten al Atlántico (salvo el Guadalquivir), es la misma que ahora se quiere desmantelar.

De hecho, según consta en la declaración de los empleados públicos de la Agencia, firmada por cinco sindicatos y remitida a la consejera de Medio Ambiente, ya se ha comenzado a desmontar la estructura. Más de un centenar de trabajadores resultarían gravemente perjudicados por esta decisión, que afectaría sobre todo a los funcionarios y al personal laboral y externo que trabaja diariamente en las instalaciones de la carretera N-IV.

También, lógicamente, dentro de esos más de cien empleados hay que enmarcar a las personas y empresas que son contratadas gracias a la actividad que genera la Agencia y que, sumados a los trabajadores públicos, «son muy necesarios ante la crisis que padecemos», dice el manifiesto.

El principio del fin

Por ello resulta sorprendente, recalcan tanto los sindicatos que firman el comunicado como las fuentes consultadas por este medio, que en enero se haya comenzado a desmontar la sede, a partir de la publicación de los nuevos estatutos de la AAA: «Se ha cesado a algunos puestos directivos y otros están en disposición de cese, por lo que entendemos que se están descabezando las oficinas de la AAA». Al mismo tiempo, «el Estatuto desdota de contenido a estas oficinas, trasladando a Sevilla y a Cádiz gran parte de las funciones que tenían asignadas». Por tanto, y según las citadas fuentes, la desaparición del centro de Jerez es «inminente».

De hecho, los trabajadores de la «triple A» (como se conoce a esta entidad dependiente de la Consejería de Medio Ambiente) temen que muchos puestos de trabajo simplemente se pierdan, mientras que otros serán reubicados entre Sevilla y Cádiz. Especial peligro corre, pues, el personal externo, ya que los funcionarios al menos tienen aseguradas sus plazas.

Ante esta situación de incertidumbre, los empleados públicos exigen ser informados por algún responsable de la AAA, o bien de la Consejería de Medio Ambiente, sobre las expectativas de permanencia de estas oficinas en Jerez, así como si van a mantenerse con contenidos concretos sus puestos «o por el contrario se va a dar lugar a que los empleados, desmotivados por la falta de trabajo, solicitemos el traslado a otros centros».

Los empleados públicos acusan por tanto a la Administración andaluza de «jugar de forma frívola con nuestras expectativas y con nuestra organización familiar». Por todo ello, van a pedir el apoyo de autoridades, sindicatos, partidos y colectivos de la provincia para que, en primer lugar, se informe a los empleados públicos «de los contenidos, tareas, funciones y competencias que se les va a asignar de cara al futuro».

Mismo trato que Málaga

También reivindican que el centro con sede en Jerez mantenga sus órganos directivos en la misma ciudad e igual trato que el que se ha dado a la extinta Dirección de la Cuenca Mediterránea con sede en Málaga. Así, recuerdan que allí ya existe el compromiso del Gobierno andaluz de que se creará la sede del Observatorio del Agua y por tanto no se perderá ningún puesto de trabajo.

En definitiva, demandan que las oficinas en Jerez «no pierdan su condición de servicios centrales, garantizando de esta forma que no se pierda ni un solo puestos de trabajo de los que actualmente están previstos».

eesteban@lavozdigital.es