Los 'antiBolonia' mantienen en el caos a Barcelona

Los altercados por las protestas 'antiBolonia' no cesan tras el desalojo por los Mossos d'Esquadra la pasada madrugada de medio centenar de estudiantes del edificio del rectorado de la Universidad en Barcelona, que degeneró en una cadena de disturbios que se saldó con siete detenidos -puestos en libertad con cargos por la tarde- y 16 imputados, además de varios agentes, jóvenes y periodistas contusionados.

La historia se ha vuelto a repetir por la noche, cuando varios miles de estudiantes -5.000 según los manifestantes, 2.000 según la Guardia Urbana- protestaban por las cargas de la mañana en la Via Laietana. Este segundo desencuentro se ha saldado con más de medio centenar de heridos -24 estudiantes y 32 mossos-, entre manifestantes, Mossos d'Esquadra, periodistas y viandantes. Además, esta nueva manifestación ha acabado con varios detenidos.

Los Mossos d'Esquadra cargaron contra los manifestantes cuando éstos intentaran entrar en la Plaza Sant Jaume, y los agentes les bloquearan el paso. El director general de la policía de la Generalitat, Rafael Olmos, ha asumido "toda la responsabilidad" por las cargas a periodistas, y revisará los procedimientos policiales para que no vuelvan a verse expuestos "nunca más ante una situación" similar.

Además, un niño de unos 10 años ha resultado herido por un golpe de los Mossos cuando pasaba por una plaza cercana a la Via Laietana con su madre, su padre, y sus tres hermanos. Al ver que los agentes golpeaban a unos estudiantes, los padres del menor han empezado a increparles y han pedido que dejaran de pegar a los alumnos, a lo que los Mossos han respondido pegando a toda la familia.

El conseller de Interior, Joan Saura, ya ha anunciado que ha encargado un informe policial para conocer el detalle de la actuación de los Mossos y, cuando lo estudie, comparecerá en el Parlament para dar explicaciones.

Sucesión de incidentes

Ayer, lo largo de la mañana, grupos de estudiantes se fueron concentrando frente a la sede de la Universitat de Barcelona (UB), en la plaza Universidad, convocados por SMS o Internet, hasta reunir a varios centenares de ellos que sobre el mediodía cortaron la Gran Vía, lo que motivó la segunda carga de los Mossos d'Esquadra que custodiaban el edificio universitario.

Tras este incidente y en medio de una fuerte tensión entre los agentes antidisturbios y los estudiantes contrarios al Plan Bolonia, los concentrados optaron por manifestarse por las calles adyacentes a la UB y posteriormente emprendieron una marcha de protesta hacia el centro de la Ciudad Condal. La sede de la Conselleria de Innovación, Universidades y Empresas en el paseo de Gràcia, los jardines del Palau Robert o la calle Còrsega, fueron los puntos elegidos para pedir la dimisión del conseller Josep Huguet.

"Mossos fuera de la universidad", "Libertad de expresión, policía no", "Somos estudiantes, no delincuentes" y "Así se aprueba Bolonia, a golpes de porra", fueron algunas de las consignas de los estudiantes que hasta en tres ocasiones han obligado a intervenir a la Policía autónoma.