GOTERAS. Una profesora recoge el agua con una fregona. / R. RÍOS
Janda

El colegio Almenara continúa con goteras en la clase de Infantil

Meses después de denunciar las carencias, los padres denuncian que el aula prefabricada donde dan clase «sigue siendo una chapuza» El Ayuntamiento de Barbate asegura que la adecentará en verano

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Los padres del colegio Almenara de la pedanía barbateña de Zahora están indignados. Sus hijos, una decena de pequeños de cuatro y cinco años, continúan dando clases entre charcos cada vez que llueve, por las malas condiciones que presenta la caseta de obra que les sirve de aula prefabricada durante este curso escolar.

Pese a que el asunto ha sido puesto en conocimiento tanto de la Delegación provincial de Educación como del Ayuntamiento de Barbate, la situación sigue siendo «una auténtica chapuza» según los padres y madres del centro.

«Cada vez que llueve, como ha pasado estos últimos días, los niños tienen que dar clase con charcos y aunque vinieron a arreglar los desperfectos tras la denuncia en los periódicos, se limitaron a poner un poco de silicona y la cosa sigue igual», apuntaba ayer Javier Fernández, uno de los padres movilizados.

La Ampa del colegio Almenara de Zahora está implicada directamente en la búsqueda de una solución a estas carencias. El próximo miércoles, padres de alumnos tienen previsto mantener una reunión con el delegado de Urbanismo de Barbate, Antonio Domínguez, para ratificar la promesa verbal que les ha hecho el Consistorio de esta localidad, «que nos ha asegurado que en verano sustituirán la caracola actual por un aula de construcción con mejores condiciones para dar clase», apuntan.

Hasta entonces, los pequeños deben buscar refugio en otras clases del centro cada vez que viene un temporal, con la consiguiente preocupación para sus padres, que se quejan de que «la empresa que montó la nave, Digavasa, ya hasta nos cuelga el teléfono», dicen.

La caracola de infantil del Colegio Almenara se ha sometido ya a tres arreglos en octubre, diciembre y febrero pasado, que no han servido para acabar con el problema de forma definitiva.

lajanda@lavozdigital.es