Economia

Merkel y Sarkozy se unen para reclamar un nuevo orden económico

En desacuerdo sobre la gestión de la crisis financiera internacional el pasado otoño, Angela Merkel y Nicolas Sarkozy forman este invierno un frente común para reclamar un nuevo orden económico mundial en la cumbre del G-20 de la próxima primavera. La canciller alemana y el presidente francés anunciaron ayer que antes de esa cita, prevista para el próximo 2 de abril en Londres, los países europeos del grupo mantendrán una reunión preparatoria en Berlín con el fin de plantear «con una sola voz» soluciones a la recesión y fórmulas para la «refundación del capitalismo».

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Merkel y Sarkozy abrieron en París, en compañía del ex primer ministro británico Tony Blair, un coloquio internacional organizado por el Gobierno francés con el título 'Nuevo mundo, nuevo capitalismo'. Participan además personalidades como el director de la Organización Mundial de Comercio (OMC), Pascal Lamy; el presidente del Banco Central Europeo (BCE), Jean-Claude Trichet; la comisaria europea de Competencia, Nelly Kroes, o el premio Nobel de Economía Amartya Sen.

Los mandatarios alemán y francés, que mantuvieron un almuerzo de trabajo en el Elíseo, proclamaron la necesidad de que la cumbre del G-20 en Londres tome decisiones efectivas para la reforma del sistema financiero mundial. También insistieron en el riesgo de una recaída del capitalismo en sus derivas una vez superada la crisis si no se actúa de forma concertada en su saneamiento.

Consejo económico

Merkel propuso la creación de un consejo económico internacional, similar al Consejo de Seguridad de Naciones Unidas, y la elaboración de una carta para una economía razonable a largo plazo a imagen de la Carta de Derechos Humanos. «Hoy tenemos una situación en la que China tiene el mayor excedente de divisas del mundo, con unos 2.000 millones de dólares, mientras el déficit de Estados Unidos es muy importante: eso representa, a la larga, un factor de inestabilidad», dijo en defensa de corregir los desequilibrios económicos mundiales.

A doce días de la toma de posesión de Barack Obama como nuevo presidente, Sarkozy lanzó una serie advertencia a Estados Unidos contra toda tentación de bloquear la adopción de medidas refundadoras en el conciliábulo de Londres.