TITULAR. Aguirre no quiere dejar escapar al Kun. / EFE
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La cara y la cruz de 2008 se ven las caras con la mente en las vacaciones

Un Espanyol al borde del precipicio quiere iniciar su escalada en la clasificación frente al Atlético de Madrid y maquillar un 2008 horroroso, mientras que los rojiblancos quieren continuar subiendo hacia puestos de Liga de Campeones.

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José Manuel Esnal, Mané, tras un prometedor estreno ante el Betis y un accidentado partido frente al Valencia intentará hacer bueno el dicho y lograr la victoria a la tercera.

De no ganar, las vacaciones navideñas serán bastante angustiosas para los futbolistas españolistas y el técnico.

Quien prefiere no pensar en las vacaciones es el entrenador del Atlético de Madrid. Javier Aguirre sólo quiere concentrarse en el último partido de este año y no mirar más allá, para poder seguir sumando puntos.

El mexicano considera que el Espanyol es el rival «más importante» que hay, porque es el inmediato, y no tiene intención de que sus jugadores se lo pongan fácil al equipo catalán en su cambio de rumbo.

El ausente en la convocatoria para Montjuic será el checo Tomas Ujfalusi, que no se ha recuperado de una gastroenteritis, pero, a cambio, el técnico confiará en Pablo, quien, a juicio de Aguirre, «no tiene nada que demostrar». El técnico teme estas fechas porque «siempre la cagamos».