El Parlamento conmemora el Pacto de Antequera en un clima de desencuentro

La Real Colegiata de Santa María volvió a acoger ayer a los diputados andaluces y a sus invitados para conmemorar el Pacto de Antequera, acuerdo firmado hace 30 años por todas las fuerzas políticas andaluzas para dar el impulso definitivo al proceso de autonomía. El acto fue breve. Constó sólo de un discurso institucional de la presidenta de la Cámara, Fuensanta Coves, en la que esta defendió una Andalucía «lejos de antiguos tópicos» y «en todos los lugares en los que debe estar por derecho propio». Coves dijo en un momento de su discurso que el Parlamento vuelve a Antequera, al punto de origen, tras treinta años de construir la autonomía, «no con dudas sobre la arquitectura diseñada, sino con el deseo de mejorarla».

Luego, los diputados, puestos en pie, escucharon los himnos de Andalucía y España interpretados por el quinteto de viento de la Banda de Música de Antequera desde una cantoría del siglo XVII.

Poco más. Al pleno institucional acudieron casi todos los parlamentarios y el Gobierno de la Junta, pero el espíritu de aquel consenso estuvo ausente y el acto, de media hora larga, se vivió en un clima desabrido y tan frío como el templo renacentista que los acogió. El desacuerdo del PP con este pleno institucional -propuso sustituirlo por un acto con la Mesa de la Cámara- y la tirantez de este partido con Fuensanta Coves desde la bronca de la pasada semana en el Parlamento, hizo que discurso y declaraciones estuvieran salpicados de puyas y reproches en torno a ello.

Coves apeló a la lealtad a la institución y en centrar el día en la «gratitud a la historia». «Tiempo habrá de divergencias», añadió. El líder del PP-A, Javier Arenas, volvió a considerar un gasto innecesario el desplazamiento de todos los diputados a Antequera y recordó que los suyos han renunciado a las dietas. También dijo que en estas conmemoraciones se debe implicar más a los ciudadanos.

Diego Valderas (IU) tildó de «tonterías» las críticas del PP-A y reivindicó que, como mejor conmemoración, se cumpla el Estatuto. Chaves reclamó a todos «serenar» el debate político y defendió la «austeridad» con la que se ha organizado el evento, que calificó de «digno y necesario». El tentempié previsto para agasajar a los políticos e invitados fue suspendido.

Al comienzo del acto se guardó un minuto de silencio por la muerte a manos de ETA del industrial vasco Ignacio Uria. Coves recordó en su discurso a otras víctimas andaluzas del terrorismo: el matrimonio Jiménez Becerril y Luis Portero. Previo al pleno institucional, el alcalde de Antequera, Ricardo Millán, hizo entrega a la presidenta del Parlamento de una réplica del busto de Plácido Fernández Viagas que hay en la plaza de su mismo nombre en Antequera.