Diputación apoya a los trabajadores de Navantia en su negociación

Los trabajadores de las tres factorías de Navantia en la provincia se han hecho hoy con un nuevo aliado en el pulso que mantienen con la dirección de la empresa, y que ha llevado a huelgas parciales y parones de actividad en las semanas pasadas. La Diputación Provincia de Cádiz ha apoyado este mediodía explícitamente las reivindicaciones sindicales y se ha comprometido incluso a llevar una moción a pleno en un mes si no hay una mejora de las relaciones.

El vicepresidente segundo de Diputación, Federico Pérez Peralta, ha resumido al término de la reunión con los representantes sindicales los apoyos concretos de la institución provincial: "Instar a la adopción de un plan industrial negociado entre las partes, cumplir los acuerdos alcanzados en diciembre de 2004 entre España y la Unión Europea que permitieron la constitución del grupo Navantia, y llevar estas reclamaciones al Gobierno de la nación, a los diputados nacionales y a la Junta de Andalucía para que estos compromisos se hagan efectivos".

Del mismo modo, el vicepresidente también desvincula la actual crisis entre empresa y trabajadores de la negociación del convenio, tal y como denuncia la dirección de Navantia. "Eso es secundario, porque lo importante es el futuro de la empresa y para eso hay que aclarar el plan industrial", apuntó Pérez Peralta, después de un encuentro en el que han estado el presidente de Diputación, Francisco González Cabaña, el propio Peralta; el otro vicepresidente provincial, Antonio Roldán; y el alcalde de Puerto Real, José Antonio Barroso.

En representación de los trabajadores de Navantia el presidente del comité del astillero de Cádiz, Jesús Gargallo, ha indicado que el actual cuadro directivo encontró una empresa saneada "que está a punto de dilapidar". A su juicio "están desaprovechando una oportunidad histórica (a tenor de una cartera de pedidos con encargos hasta el año 2012), pese a que los trabajadores hemos cumplido con la reducción de plantilla y se privatizaron la mayor parte de los astilleros del antiguo grupo Izar".

A todo esto, los próximos capítulos del conflicto son inminentes: mañana mismo, se bota un buque encargado por Venezuela en el astillero de San Fernando y se repetirán las protestas de los trabajadores. Y el viernes, la empresa ha llamado al comité intercentros a una reunión en Madrid. "Dicen que quieren negociar, pero eso habrá que verlo", opina Gargallo.