«Sólo queda ver la bandera a cuadros y coger el avión»

Ha sido una pena. Sabía que la pole era inalcanzable, pero ser segundo o tercero estaba seguro. Todo se ha perdido con este problema que hemos tenido». Ese era el primer mensaje que lanzó a Alonso tras bajarse del coche. La decepción del asturiano cuando se bajó del coche fue muy grande, y los gestos que hizo denotaban un terrible enfado, porque sabía que estaba luchando por la pole y quién sabe si la victoria, o el primer podio de la temporada. Ahora sólo queda «ver la bandera de cuadros y coger el avión». «Es como Mónaco: no hay nada que hacer, no se puede adelantar en ningún sitio del circuito», afirmó el asturiano. Dejó claro, eso sí, que el incidente fue fortuito y que no tendrá ninguna influencia en su decisión de futuro. «Se trata de una avería que le puede pasar a cualquiera. El coche se ha parado y ya está. No pasa nada. Yo me salí en Mónaco y Canadá... Tanto si hubiera logrado la pole como ahora, que saldré el decimoquinto, no va a cambiar nada mi decisión».