TRABAJO. Verónica Pérez, asistió el martes a la sesión en la Cámara andaluza. / ANTONIO MONTILLA
ANDALUCÍA

Del escaño al paritorio

La parlamentaria del grupo socialista Verónica Pérez continúa participando en los Plenos a pesar de acumular ya seis jornadas 'fuera de cuentas'

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Alonso tenía que haber llegado el día 20, como la cuantificación de la deuda histórica, pero ambos incumplieron el plazo fijado. Claro que Verónica no está dispuesta a darle seis meses de prórroga como ha hecho el Gobierno central; como mucho, unos días más.

Y es que Verónica Pérez está ansiosa por verle la cara al pequeño Alonso. Mientras llega su primer parto, esta parlamentaria socialista cumple con su trabajo hasta las últimas consecuencias. El martes, por ejemplo, aguantó hasta el final de un Pleno que se alargó pasada las once de la noche. Está dispuesta, si es necesario, a irse del escaño al paritorio. Ayuda, y bastante, el hecho de que el Parlamento de Andalucía esté a unos 100 metros de distancia del hospital Virgen Macarena de Sevilla. Por si acaso, todos los parlamentarios médicos ya le han prometido sus servicios si las contracciones pueden más que los discursos. Pérez, portavoz del PSOE en la Comisión de Medio Ambiente, tiene previsto compartir la baja de maternidad con su esposo. Un gesto que alivia, sin duda, a su grupo parlamentario. Sin su voto, el PSOE pierde la mayoría absoluta.

Una circunstancia que tiene un efecto menos negativo para el PSOE de lo que se podría pensar. La proporción actual es de 56 a 53 (sumando los escaños de PP e IUCA). Sin Verónica -y sin su compañera de bancada Elia Maldonado, también de baja por maternidad-, los socialistas mantienen una holgada primacía, aunque no podrían aprobar leyes que exijan una mayoría absoluta (como la de elección del nuevo director general de la RTVA, por ejemplo).

Votación telemática

La presidenta del Parlamento, Fuensanta Coves, quiere acabar con este contratiempo con sabor a machismo o, en cualquier caso, que atenta contra la conciliación familiar y contra la igualdad de oportunidades de hombres y mujeres. Propone que, en casos extremos como este, se pueda votar por Internet desde casa.

Pérez lo tiene claro: «Tanto mi pareja como yo tenemos claro que tener un hijo es una responsabilidad compartida, por lo que no creo que afecte de una forma negativa en mi vida laboral». Sí es consciente de que, como a cualquier madre, sí va a modificar su día a día, algo que está deseando que ocurra. Ya está en la cuenta atrás.