La ampliación del Parador se aprueba al fin, pero no hay dinero para ejecutarla

La ampliación del hotel Atlántico, el Parador de Cádiz, ya cuenta con todas las bendiciones. Sin embargo, las obras no podrán arrancar puesto que no hay consignación presupuestaria para este nuevo edificio, que acogería entre 70 y 100 habitaciones y que se considera básico para la conmemoración del Bicentenario.

Lo que ya se puede dar por seguro es que la ampliación no estará a tiempo para 2012, ya que según el último informe que obra en poder de Turespaña -la entidad a la que le corresponde hacer las inversiones en los paradores nacionales- las obras tardarían tres años.

Turespaña alegaba hasta ahora que no podía destinar presupuesto para estos trabajos porque el terreno aún no había pasado a ser propiedad de Patrimonio del Estado.

Cinco años, al menos

Por lo tanto, si lo normal es que una obra, entre proyecto y trámites burocráticos (concursos, adjudicación y firma del contrato del proyecto básico más el proyecto de ejecución), tarde dos años en iniciarse, habría que anotar hasta cinco años más. Es decir, la ampliación podría estar finalizada como pronto en 2013. Y eso contando con que reservara una partida en los presupuestos de 2009 para ir iniciando los trámites.

En cualquier caso, este primer objetivo de modificar el planeamiento urbano para legalizar esta actuación está al fin cumplido. La Consejería de Vivienda y Ordenación del Territorio ha aprobado definitivamente la modificación puntual del Campo de Balas (terreno donde se ubicaría el nuevo edificio). Así lo informó ayer en una nota de prensa.

Esta modificación puntual del Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) consiste en cambiar el uso militar que tenía este terreno a uso hotelero, ya que el espacio era propiedad del Ministerio de Defensa, que en su día lo desafectó.

La Junta explicó que este cambio de asignación se considera de interés social y general, ya que generará una oportunidad de desarrollo en la zona y mejorará la dotación de equipamiento hotelero de la ciudad.

El ámbito afectado, ahora propiedad municipal tras la desafectación, posee una superficie global de 23.997 metros cuadrados, de los cuales unos 9.487 se destinarán a la ampliación del complejo hotelero.

El resto del terreno se reservará a espacios libres y a la obtención de suelo, que permitirá dar continuidad al paseo que bordea el casco antiguo. Actualmente se puede pasear por el borde de la ciudad hasta llegar a Santa Bárbara, por un lado y hasta Santa Catalina por el otro. Con este suelo, se podrá completar el perímetro del casco antiguo.

La actuación, destacó el Ejecutivo autonómico, «implica la completa reordenación de la zona, libera espacio libre para uso público, reordena los aparcamientos y reurbaniza distintas superficies».

mcaballero@lavozdigital.es