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La UE reconoce que la entrada de Serbia está «mucho más cerca»

Las instituciones europeas, la OTAN y el propio Tribunal para los Crímenes de la ex Yugoslavia, con sede en La Haya, saludaron ayer con alegría la detención de uno de los hombres más buscados del planeta, Radovan Karadzic.

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Para los europeos, la caída del responsable directo del sitio de Sarajevo y de la masacre de Srebrenica constituye una muestra del proceso de aproximación a la UE emprendido por el nuevo primer ministro, Boris Tadic. En general, las voces que ayer salieron a la palestra para glosar la situación apuntaban a una facilitación del proceso de convergencia serbio con Europa, pero nadie adelantaba acontecimientos. La UE firmó en abril un acuerdo de asociación y estabilización con Serbia, pero subordinó su entrada en vigor a la plena colaboración de Belgrado con el Tribunal de La Haya. Los miembros de la Unión, algunos de los cuales, como Holanda son muy críticos con Belgrado, tienen el control absoluto del proceso de aproximación de Serbia al disponer del recurso de la ratificación del acuerdo en sus respectivos parlamentos nacionales.

Colaboración

Javier Solana, que defiende la aproximación de Serbia a la UE, expresaba ayer su esperanza de que La Haya certifique la «plena cooperación» de Belgrado con la justicia, de modo que las últimas reticencias sean obviadas. «Es casi seguro que el fiscal (Serge Brammertz) proclamará que existe esa plena colaboración», decía Solana en Bruselas, donde se reunían los ministros de Exteriores de los Veintisiete y adonde se había desplazado también Vuk Jeremic, el canciller serbio.

En una rueda de prensa celebrada por el comisario para la ampliación, Olli Rehn, y el propio Jeremic, el responsable comunitario manifestó que las cláusulas comerciales del acuerdo de asociación contempladas en lo que se denomina el acuerdo interino deberían comenzar a aplicarse inmediatamente. Rehn llegó a reconocer que la adhesión de Serbia a la UE «está mucho mas próxima» tras la detención de Karadzic. La OTAN, por su parte, recordaba la necesidad de que también sea detenido el ex general Mladic.

El ministro serbio de Exteriores manifestó por su parte que Belgrado quiere obtener el estatuto de candidato a la adhesión antes de que concluya el año. Reiteró que, en ningún caso, su país hace ni hará dejación de sus derechos sobre Kosovo. El presidente del Consejo Europeo, el francés Bernard Kouchner, saludó la detención con un «¿Por fin! ¿Hace trece años que esperábamos esto! Pasamos página».