Rajoy ofrecerá a Zapatero «apoyo leal» ante la crisis y la consulta de Ibarretxe

Mariano Rajoy propondrá a José Luis Rodríguez Zapatero en la entrevista del 23 de julio que Gobierno y oposición trabajen «codo con codo» para afrontar lo que, a su juicio, son los grandes retos de esta legislatura: la crisis económica y la consulta que impulsa Juan José Ibarretxe. El líder del PP, tras neutralizar a sus críticos e imponer a su partido un giro al centro, ha decidido, al parecer, enterrar la estrategia de confrontación de la pasada legislatura y ofrecerá al jefe del Ejecutivo «apoyo leal» para hacer frente a ambos desafíos.

Rajoy indicó ayer en el discurso de clausura del campus de verano de la Fundación Faes que el paso a una política de cooperación sólo será posible si el presidente del Gobierno es sensible a sus recetas para afrontar esos retos y si «quiere pensar responsablemente en los ciudadanos y en sus problemas reales». «Si hace eso -dijo- estaremos a su lado, si no, que sepa que no prestaremos nuestra colaboración».

El presidente del PP, de hecho, advirtió a Rodríguez Zapatero de que la actitud del Gobierno en los primeros meses de legislatura es «preocupante» e «irresponsable». Reprochó que todavía «eluda» llamar a la grave crisis «por su nombre» y que introduzca «debates artificiales» -laicidad, aborto o eutanasia- para «distraer la atención» de las dificultades económicas y en busca de «objetivos partidistas», como son abrir escenarios de confrontación con el PP y los colectivos sociales conservadores.

Misma dirección

La oferta de Rajoy parte de la premisa de que «tendremos que enfrentarnos a una realidad política que exigirá grandeza y sentido de la responsabilidad colectiva» para lo que «todos tenemos que trabajar en la misma dirección» con «consenso y evitando escenarios de crispación».

Esa realidad, según su análisis, pasa por atajar la recesión, «que puede convertirse en una grave crisis social», por «enfrentarnos al reto» del lehendakari Ibarretxe, por encauzar por Ley la Inmigración ilegal, «que sigue presionando nuestras fronteras», y por «dar respuesta al desbordamiento de una justicia sin recursos y sujeta al zarandeo político del Gobierno».

Mariano Rajoy dejó claro que situará la crisis en el centro de su labor opositora e instó a Rodríguez Zapatero a dejar de «esconderse» y «decir la verdad» después de que «falseó» la situación durante la campaña electoral. Debe, añadió, empezar por reconocer la gravedad de un problema que, en su opinión, ya ha mostrado «indicadores alarmantes» (desempleo, inflación, tipos y caída del consumo). El líder del Partido Popular sostuvo que, de la mano de los sindicatos y de los empresarios, «hay que coger el toro por los cuernos» y dar soluciones concretas que devuelvan la confianza.