Ningún comercio pudo acogerse a las ayudas de rehabilitación de la Junta

La orden para subvencionar la rehabilitación de los comercios del casco antiguo, anunciada en febrero de 2007 (y ejecutada dos meses después) por la entonces consejera de Obras Públicas, Concepción Gutiérrez, no ha dado muchos resultados. Más bien, nulos. De la veintena aproximada de peticiones presentadas para acogerse a las ayudas, ninguna se ajustaba a las bases, según informaron fuentes de la Oficina de Rehabilitación.

Aparte de las condiciones económicas, las subvenciones estaban dirigidas a la rehabilitación de comercios y locales que estuvieran en edificios ya recuperados por la Junta.

Habrá que esperar ahora a la nueva convocatoria de ayudas, más amplia y sectorializada por barrios que sin embargo no termina de aprobarse. El nuevo delegado de Vivienda, Gabriel Almagro, ha anunciado que será en otoño cuando esté disponible, con varios meses de retraso, teniendo en cuenta que el documento del que salió la iniciativa fue presentado el año pasado.

Esta línea de actuación trabajará en función de sectores, con vistas a incentivar el arreglo de locales que alberguen nuevos negocios relacionados con la población o la historia del lugar. Así, la intención de los responsables autonómicos es «cubrir los servicios mínimos con un estándar de calidad homogéneo y proporcionar las herramientas necesarias para desarrollar el potencial endémico de cada uno de los sectores de la ciudad».

De esta manera, en esta nueva línea de ayudas, se favorecerá la implantación de locales relacionados con la artesanía y el flamenco en el barrio de Santa María, así como los negocios que tengan que ver con productos de uso diario: droguerías y ferreterías, por ejemplo.

En San Carlos, la orientación será hacia servicios turísticos y de restauración. En San Juan, se primará la apertura de nuevos locales que completen la oferta de la plaza de Abastos (pastelería, bombones, floristería, vinos y licores) y también de los relacionados con el Carnaval.

Una actividad, la del Carnaval, que también se potenciará en La Viña, así como los bares, cafeterías, restaurantes y heladerías en torno a la calle de La Palma.

En el Mentidero, el objeto de las ayudas irá hacia las empresas relacionadas con los estudiantes (copistería, cibercafé o gimnasios) y también al comercio de proximidad para cubrir las necesidades de los vecinos en las calles Adolfo de Castro, Carmen, Vea Murguía, Ustariz, Gravina, del Molino y Horozco. En El Balón también los estudiantes serán los protagonistas y en el centro los servicios que apoyen la oferta que ya existe de comercio.

mcaballero@lavozdigital.es