LOS HÉROES. Algunos de los jugadores que han estado en esta Eurocopa deberán dejar paso a las nuevas generaciones que vienen pisando fuerte y que serán los protagonistas en el próximo Mundial: Sudáfrica, 2010. / EFE
MÁS FÚTBOL

¿Y ahora qué?

Casi sin tiempo para digerir el éxito de la Eurocopa, la selección vivirá la transición de Aragonés a Del Bosque con los primeros partidos de clasificación para el Mundial

Actualizado: Guardar
Enviar noticia por correo electrónico

¿Y ahora qué? Luis Aragonés abandona la selección por la puerta grande tras el éxito de la Eurocopa y asumirá el mando Vicente del Bosque, un técnico de talante muy distinto al del 'sabio de Hortaleza' que empezará su nueva etapa en una situación incómoda. ¿Entenderá la afición un cambio de filosofía y también de caras tras haber recuperado la ilusión dos décadas después? ¿Mantendrá la columna vertebral de su predecesor o apostará por la revolución? Haga lo que haga, mil ojos con lupa estarán pendientes de sus intenciones. Tendrá que decidir con celeridad, porque se estrenará en el banquillo de la 'roja' en agosto en un amistoso ante Dinamarca y, ya en septiembre, tiene los primeros compromisos de clasificación para el Mundial de Sudáfrica ante Bosnia y Armenia.

Ha costado muchos años formar un grupo competitivo, y romperlo sería como empezar de cero. Pero cada entrenador tiene sus propios gustos y quiere dejar su sello. Si la España de Del Bosque empieza bien su camino hacia la Copa del Mundo todo irá sobre ruedas, aunque las comparaciones serán inevitables si el juego pierde calidad y los resultados no acompañan. Sería injusto decir que el sustituto de Aragonés hubiese preferido coger el equipo después de otro fracaso en una gran competición. Sin embargo, es innegable que la gran actuación en la cita de Austria ata de alguna manera al 'nuevo'. La continuidad sería bien entendida. Una reestructuración no tanto. Y es que la plantilla que ha hecho historia es una mezcla casi perfecta entre la veteranía de futbolistas ya ilustres y el desparpajo de las nuevas generaciones.

No es que España haya ganado partidos, un dato ya de por sí relevante, sino que los seguidores han vibrado con momentos de fútbol con mayúsculas fabricado por los niños traviesos Iniesta, Silva y Cesc a las órdenes de Xavi y con Senna cubriéndoles las espaldas. Del Bosque se ha mantenido hasta ahora en un discreto segundo plano, y eso le honra. Pero a nadie se le escapa que su primera lista de convocados va a ser analizada como si fuera un documento con rango de Ley. La acumulación de jugones ha funcionado como una máquina de precisión en el esquema diseñado por Aragonés. ¿El sistema de su sustituto será el mismo o habrá modificaciones? ¿Es conveniente estructurar un vestuario desde la nada cuando ya hay uno unido en el que todos se conocen?

Tampoco es un plato de buen gusto para un seleccionador asumir las riendas de España cuando sabe que un sector influyente de la Federación hubiese preferido ofrecer la renovación a Aragonés, que pondrá rumbo a Estambul. Es como si el contrato se firmara porque no queda más remedio y aún se notara el calor de su predecesor en el banquillo sin haber tomado posesión del cargo. Difícil papeleta para del Bosque, que deberá asumir que,el debate entre sus defensores y sus detractores va a ser más enconado que nunca. Y todo ello con los incesantes halagos a la 'roja' de Austria por parte de los entendidos. «Estos chicos van a marcar una época en el fútbol», ha declarado, entre otros, José Antonio Camacho.

Recambio generacional

En la portería hay un bastión, Iker Casillas, que por el momento es insustituible. Las apuestas sobre el mejor guardameta del mundo se cotizan cien a uno a su favor y su ascendencia en el vestuario es innegable. Con sus altibajos, parece que el lateral derecho está reservado a Sergio Ramos, que con sólo 22 años ha adquirido una gran experiencia a las órdenes de Aragonés. Es en la banda izquierda y en el centro de la defensa donde las cosas no están tan claras. Capdevila gusta al de Hortaleza, pero ya tiene 30 años y su recambio actual, Fernando Navarro, no ha tenido muchas oportunidades para demostrar su valía. Puyol y Marchena, por su parte, han completado una excelente Eurocopa, aunque son de la misma edad que el del Villarreal y Del Bosque necesitará pensar en recambios de garantías para la cita de Sudáfrica.

Por eso se puede abrir una puerta para futbolistas como Fernando Amorebieta, un central con una proyección fantástica que ha alcanzado su madurez con Joaquín Caparrós en el banquillo del Athletic. El rojiblanco es joven (23 años), va bien por arriba y sabe sacar el balón con criterio, un aspecto clave si el nuevo seleccionador mantiene en parte el núcleo central de España. Su última temporada ha sido extraordinaria y llegó a figurar en la agenda de Aragonés, aunque su inexperiencia internacional jugó en su contra a la hora de elaborar la lista para la cita de Austria y Suiza. Albiol es de su misma edad y también tendrá opciones. El que lo tiene más complicado es Juanito, una apuesta personal del de Hortaleza que se ha quedado algo estancado.

En el centro del campo hay futbolistas del máximo nivel: Xabi Alonso, un secundario de lujo; Senna, el pulmón del equipo al que habrá que darle un respiro con otra pieza de garantías; Xavi, único en su puesto; Iniesta, magia pura; Silva, el rey del juego entre líneas, y Cesc, el futuro de la selección. Cazorla llegó a la Eurocopa por la puerta de atrás y ha demostrado que puede rendir al máximo nivel, y Bojan, el gran ausente al no sentirse preparado, está llamado por su inigualable profundidad a triunfar con el combinado nacional si entra en los planes de Del Bosque. Arriba, parece que no hay discusión con Villa, Torres y Güiza. En cualquier caso la última palabra la tendrá el nuevo seleccionador.