El Tendedero | Un año y...

Está claro que la oposición al gobierno municipal ya no está protagonizada por los partidos perdedores, pues la verdad parecen estar en una especie de perplejidad no superada desde aquel 27 de mayo. El PSA sigue atónito y descolocado, con vagos intentos de renacer cual ave fénix; el PP, a su pesar, se ha convertido en el gran circo nacional, en un espectáculo mediático cotidiano rayando en el culebrón; por su parte, IU va desmontando sus altares ideológicos poco a poco, de forma sigilosa, pero no menos convulsa, aunque a decir verdad a sus militantes no les falta constancia. En fin, que después de una mayoría absoluta del PSOE en Jerez, y después de la victoria de los socialistas a nivel autonómico y estatal, el panorama político local ha quedado más aburrido que ver girar la lavadora.

Eso lo saben muy bien los periodistas, para los que dar un titular cada día a veces se convierte en un auténtico ejercicio de imaginación.

La verdadera oposición al Gobierno local está en la calle, en el movimiento ciudadano, que ha sabido defender mejor que cualquier sigla sus propios intereses. Ésa es la verdadera democracia, mucho más allá del voto cada cuatro años. La participación en primera persona del plural, la defensa de lo colectivo por encima de la defensa de lo particular.

Ante este panorama sorprende ver cómo aún hay quien retoma la bandera de la utopía e inicia una aventura política, toma unas siglas, amasa una ideología, reúne voluntades y forma un partido, como el PUM+J (Por un mundo más justo). Concurrieron por primera vez a una convocatoria electoral en 2004, yo lo descubrí las pasadas elecciones generales en Granada. Recientemente, un grupo de gaditanos y gaditanas se han sumado a este proyecto y han comenzado a darlo a conocer en nuestra provincia. Aunque leyendo su argumentario político parece que estén más cerca de los mundos de Yupi que de la realidad, habrá que estar atentos a este proyecto político y no despreciar los más de 125.000 votos que obtuvieron en las pasadas generales.