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Los problemas han crecido

Un estudio estadístico confirma que los jóvenes españoles actuales son los más altos de la historia, pero también los más gordos

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Los españoles hemos crecido unos tres centímetros de media respecto a la estatura de 1988 y nos hemos igualado en talla al resto de los europeos de nuestro entorno. Pero también vamos ganando peso y no de forma proporcional, precisamente. Si hace veinte años sólo un 3% de los niños tenían sobrepeso, hoy esta cifra se ha multiplicado por tres en el caso de las niñas y por siete en los niños. «Esto significa que nuestros niños y adolescentes son más altos, pero tienen más peso, por lo que la obesidad en nuestro país está avanzando», advierte Antonio Carrascosa, jefe del Servicio de Pediatría del Hospital Vall d'Hebrón, de Barcelona. Estas conclusiones se han obtenido del Primer Estudio Transversal Español de Crecimiento 2008, en el que han participado también los hospitales Miguel Servet de Zaragoza, Universitario de Basurto, San Cecilio de Granada y Carlos Haya de Málaga. En total, se ha medido y pesado a más de 34.500 niños y adolescentes de todas las edades, desde el nacimiento a los 20 años.

La ganancia de peso empieza en los primeros años de vida, como advierte Juan Pedro López-Siguero, presidente de la Sociedad Española de Endocrinología Pediátrica. «A partir de los tres o cuatro años, nuestros niños ya se diferencian en cuanto a peso de los que viven en los países europeos del entorno y se parecen más a los americanos de Estados Unidos y México. Cuando llegan a los diez o doce años, las diferencias respecto de los europeos son aún más importantes». Aunque a partir de los catorce años, las adolescentes empiezan a preocuparse por su imagen y se desmarcan de la tendencia al sobrepeso de los varones. situándose en el cuarto lugar en el ránking europeo, por detrás de lás feminas de Holanda, Suecia y Reino Unido, que pesan más que las españolas. Entre las causas que favorecen el sobrepeso ambos especialistas señalan un aporte calórico excesivo -con alimentos que tienen muchas calorías en poco volumen- y la tendencia cada vez mayor al sedentarismo.