Chaves apela a la solidaridad «de ida y vuelta» entre todas las comunidades autónomas

Andalucía quiere volver a jugar un papel vertebrador en el debate territorial que se desarrollará en la próxima legislatura, sobre todo en dos cuestiones básicas: la financiación y la política de aguas.

Un objetivo que ayer esbozó Manuel Chaves en su discurso de toma de posesión como presidente del Gobierno andaluz. Chaves, en concretó, indicó: «La solidaridad entre las comunidades autónomas de España es y puede ser de ida y vuelta, en la que todos podemos aportar y que fortalece la cohesión de este proyecto común llamado España».

Unas palabras que cobran un especial significado, no sólo por la solemnidad del acto, sino porque entre los asistentes se encontraban la vicepresidenta del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega y, sobre todo, los presidentes de Cataluña y Baleares, José Montilla y Francesc Antich, respectivamente.

Chaves considera una exigencia actuar con tolerancia. Rechazó la intolerancia y el sectarismo porque, con estos ingredientes, nunca se ha podido construir un futuro de progreso y convivencia.

«Para mí, Andalucía es lo primero», dijo en otro momento de su intervención para matizar, un segundo después, que esa afirmación no tiene nada de excluyente. El flamante presidente andaluz, que afronta su sexto mandato consecutivo, desea una Andalucía abierta y, al tiempo, plenamente integrada en España y en Europa, lejos de cualquier tentación de aislamiento.

El líder del Ejecutivo andaluz realizó, durante su intervención, un resumen de los retos que afronta nuestra comunidad autónoma en los próximos cuatro años y, a la vez, acentuó las líneas básicas de su acción de gobierno.

Dialogar. Manuel Chaves quiere conjugar este verbo de todas las maneras posibles. Un intercambio de ideas que irá más allá del ámbito parlamentario hasta calar en las relaciones de la Administración autonómica con los ayuntamientos y con los agentes sociales y económicos.

Convencimiento

Una apuesta por el consenso que le llega a Chaves desde un convencimiento personal, situado por encima de la aritmética parlamentaria, de que gobernar para todos significa hablar y contar con todos.

El presidente andaluz se mostró inconformista con los logros ganados por los andaluces en los últimos 30 años. Coincidió con Fernández de la Vega, que le precedió en el turno de la palabra, en subrayar que Andalucía ha avanzado mucho en las tres últimas décadas, dejando atrás ese pasado que hacía diferente a este territorio. Una diferencia, explicó Chaves, negativa que excluía a los andaluces del desarrollo económico, que marginaba a la región del progreso y que, en definitiva, excluía a Andalucía de la modernidad.

El mandatario andaluz se fue dirigiendo durante su alocución a todos los sectores de las sociedad: a los jóvenes, a los mayores y, en especial, a las mujeres. Puso en valor la trayectoria de ocho años de gobiernos paritarios en Andalucía y, de paso, le mandó un mensaje -sin citarlo expresamente- al primer ministro italiano, Silvio Berlusconi, que ha valorado con sorna el hecho de que en el Gobierno de España haya más ministras que ministros. «No sé si alguien podrá decir que será un gobierno rosa. No sé si será rosa o rojo, o violeta o verde y blanco. Lo que no será es un gobierno gris», apostilló.

Riqueza cromática

Lo importante para Chaves, en cualquier caso, es que los ejecutivos español y andaluz tengan toda la riqueza cromática que sólo puede aportar la igualdad entre los hombres y las mujeres. Pidió que se desterrara el machismo y se congratuló de que el principal partido de la oposición en España ya no tenga un portavoz, sino una portavoz, en alusión a Soraya Sáenz de Santamaría.

Chaves cerró sus primeras palabras, tras prometer su cargo como presidente andaluz, detallando que siente como se le ha multiplicado su sentido de la responsabilidad tras ganar las elecciones autonómicas del pasado 9 de marzo. Aseveró que se le ha acrecentado su convicción de que va a responder a la ciudadanía con la mayor entrega, dedicación y firmeza con el mismo objetivo que ha caracterizado su extensa trayectoria política. «Poner mi grano de arena para construir una sociedad más justa y más solidaria, una Andalucía más fuerte y cohesionada.

Al acto de toma de posesión de Chaves asistieron ayer, además de Fernández de la Vega, los ministros del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba; Fomento, Magdalena Álvarez; Igualdad, Bibiana Aído; Salud, Bernat Soria; y Exteriores, Miguel Ángel Moratinos.

Ausencias

El presidente andaluz también estuvo arropado por miembros de su gobierno, que mañana prometerán sus cargos. Entre los invitados destacaron, igualmente: el secretario general de la Presidencia, Bernardino León; el secretario de Organización del PSOE, José Blanco y representantes de diversos ámbitos de la sociedad.

Javier Arenas, presidente del PP-A y Diego Valderas coordinador regional de IUCA, no estuvieron presentes, aunque sí hubo representantes de ambos partidos.