Relevo en Interior

a designación del hasta hora director general de Protección Civil y Emergencias, Francisco Velázquez, como nuevo mando único de las Fuerzas de Seguridad del Estado cierra tanto la interinidad generada por la anunciada salida de Joan Mesquida. El refuerzo de Camacho al frente de la lucha antiterrorista y la cordialidad que mantiene con Velázquez deberían servir para evitar futuras descoordinaciones o tiranteces que sólo lastrarían la eficacia de la respuesta que requiere el regreso a las armas de ETA y la persistencia violenta de su entorno, reflejado en la desarticulación de un grupo de apoyo a la banda ayer en Guipúzcoa. Junto a ello, la dilatada trayectoria como gestor del nuevo alto cargo parecen garantizar un útil conocimiento tanto de los resortes administrativos, como de otras facetas de las FSE que van más allá del combate contra el terror.