Un simulacro de guerra para el Príncipe

El Retín se convirtió en Vietnam durante unos minutos, con Rambos nacidos en Jaén, Toledo, Cádiz... Don Felipe de Borbón presidió ayer en el Campo de Adiestramiento de la Sierra del Retín un ejercicio anfibio en el que tomaron parte 185 efectivos pertenecientes a distintas unidades de la Flota y la Infantería de Marina. La práctica simuló el asalto a un objetivo y un posterior rescate de rehénes y sirvió para mostrar al Príncipe la alta capacidad que tienen estas tropas, vehículos y embarcaciones para afrontar dicho tipo de operaciones.

Las maniobras dieron inicio poco después de las 11 horas, cuando el Príncipe de Asturias llegó, a bordo de un helicóptero, al campo de adiestramiento. Don Felipe supervisó la puesta en escena del caso práctico desde primera línea de playa.

Espectáculo

La simulación fue representada en apenas 20 minutos, pero la escasa duración del acto no impidió a los efectivos hacer gala de una espectacularidad propia de una superproducción del género bélico. En cuestión de segundos, el silencio de una playa desierta dejó paso al estruendo de las explosiones, los disparos y el paso de numerosos carros blindados, entre los que destacaron seis vehículos de asalto anfibio, cuatro todoterrenos Hummer y tres vehículos de combate de Infantería.

El ejercicio estuvo coordinado desde alta mar por el buque Galicia, que transportó la mayor parte de las unidades participantes. El Galicia permaneció escoltado por la fragata Santa María, mientras que el buque Pizarro se encargó de transportar a la playa la fuerza de desembarco. La presencia del portaaviones Príncipe de Asturias y de dos unidades navales de Reino Unido y Francia completaron la cobertura marítima del simulacro.

El apoyo aéreo de la operación corrió a cargo de cuatro aviones Harrier, dos helicópteros y dos cazas, que no cesaron de sobrevolar la zona de desembarco.

Una vez concluida la simulación, Don Felipe se trasladó en helicóptero al buque Galicia. Ya a bordo de la embarcación, el Príncipe visitó el dique de la nave y posó con la tropa para la tradicional fotografía de grupo. Ésta es la segunda vez en menos de un año que Su Alteza Real visita la provincia, ya que en otoño de 2007 presidió el acto de calificación operativa de la fragata Álvaro de Bazán.

El ejercicio anfibio de la pasada jornada fue ejecutado bajo el mando del comandante del Grupo de Unidades de Proyección de la Flota, el contralmirante Santiago Bolívar Piñeiro. El Estado Mayor estuvo encabezado, a bordo del Galicia, por el general jefe de la Brigada de Infantería de Marina, el general de brigada Luis Martín de la Hoz.

Martín de la Hoz explicó que las maniobras pretendían resumir en escasos minutos, ante Don Felipe, las acciones propias y más comunes de los grupos de la Flota y la Infantería de Marina que tomaron parte en ellas.

Las unidades que actuaron en El Retín desarrollarán en junio, en aguas canarias, un ejercicio conjunto con la Armada brasileña. Dicho adiestramiento tendrá continuidad en Itaca, Brasil.