UNIFORME. Un grupo de enfermeras de San Rafael con el uniforme de la discordia. / ÓSCAR CHAMORRO
Ciudadanos

La Junta pide un informe a las clínicas de Pascual sobre el uniforme de las enfermeras

El parlamentario andaluz de IU Ignacio García ha requerido a la Junta para que «tome cartas» en un asunto que tildó de incumplimiento de la Ley de Igualdad El sindicato sanitario Satse asegura que el vestuario impuesto no es funcional

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La Delegación Provincial de Salud de la Junta de Andalucía informó ayer de que ha enviado a la empresa Pascual un requerimiento para que informe acerca de la denuncia pública realizada por el comité de empresa del hospital de San Rafael en Cádiz. En ésta se aseguraba que la plantilla de enfermeras habían sido sancionadas por usar pantalones y no falda para desempeñar su trabajo. La Administración autonómica envió a la dirección de la compañía esta solicitud el pasado miércoles y está a la espera de una contestación por parte de la empresa.

Las mismas fuentes recordaron que el concierto que la Junta de Andalucía mantiene con la empresa Pascual para sus hospitales es asistencial, en cuanto a la prestación sanitaria que se le da a los pacientes. No obstante, la Delegación recordó que desde que tuvo conocimiento de los hechos mostró su «inquietud» por ello y manifestó que está a la espera del informe requerido a la empresa para valorar la situación una vez que cuente con toda la información.

La secretaria provincial del sindicato de enfermería Satse, Carmen de Porres, por su parte, calificó ayer como «indignante y vergonzosa» la actitud de la empresa Pascual para con sus enfermeras en sus distintos centros sanitarios «al obligarlas a llevar pequeñas faldas en lugar de pijamas sanitarios, bajo la advertencia de eliminarles el plus de productividad de sus nóminas». De Porres sostuvo que la utilización de este tipo de vestimenta, «con faldas, leotardos, zuecos y cofia, entre otros elementos», cayó en desuso hace más de 20 años porque «era muy poco funcional para el trabajo de las enfermeras». «La falda sube cada vez más y el escote baja», lamentó De Porres, quien advirtió de que esta situación también se produce en «otros hospitales con los que cuenta en la provincia, así como en Huelva y Málaga».

Iniciativa parlamentaria

El parlamentario andaluz de IU en funciones Ignacio García anunció ayer respecto a este conflicto que abrirá la legislatura parlamentaria con dos iniciativas dirigidas a las consejerías de Salud y de Igualdad y Bienestar Social para que intervengan ante la actitud de la empresa Pascual al «obligar a enfermeras, auxiliares clínicas y limpiadoras de todo el grupo a utilizar falda como parte del vestuario de trabajo». Señaló que en espera de la constitución oficial de la Cámara andaluza, ha remitido sendos escritos a las consejeras en funciones de Salud y de Igualdad y Bienestar Social, María Jesús Montero y Micaela Navarro, respectivamente, «para que tomen cartas en el asunto» ante lo que calificó como «claro sexismo de la principal empresa hospitalaria concertada por el Servicio Andaluz de Salud en la provincia». Asimismo, consideró que se trata de un «incumplimiento flagrante de la Ley de Igualdad y una discriminación intolerable hacia el sexo femenino», por lo que ha solicitado la intervención de la Administración autonómica. hazte Oír: Queremos saber su opinión.

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