Eya Yerbabuena repasa hoy sus mejores coreografías en 'Santo y seña'

La memoria de Eva Yerbabuena exigía un retrato cabal, que celebrase los diez primeros años al frente de su propia compañía. Esta bailaora de mirada intensa y expresión serena se ha convertido en uno de los estandartes indiscutibles del baile flamenco. Sobre el escenario despliega un abanico único de valores que aúnan el dominio técnico con la fuerza arrebatada de su talento innato. Exquisita y temperamental, en Santo y Seña, el espectáculo que llega esta noche al Villamarta, plantea toda una declaración de los principios sobre los que asienta su baile.

El montaje que la devuelve por segundo año consecutivo al Festival de Jerez recoge algunas de las coreografías que durante su carrera en solitario le han reportado la popularidad y el prestigio que atesora en la actualidad. Pero, como se ha encargado de dejar claro, no estamos ante un simple popurrí, sino ante una obra de retazos hilvanados que dejan al trasluz el talento innato de una bailaora y coreógrafa de excepción. La jornada se completa con el toque de Juan Campallo y el cante de Juan Pinilla, en Villavicencio, y el espectáculo ConCiertogusto de Rafaela Carrasco.

Con Santo y seña, la bailaora granadina nacida en Frankfurt se ha propuesto echar la vista atrás y regalar a sus incondicionales sus mejores momentos, aunque también ha creado un movimiento coreográfico ex profeso para el montaje: unos tientos-tangos que denomina Quiero y no quiero. Un total de 15 artistas la acompañarán sobre el escenario, entre músicos y cuerpo de baile.

Eva Yerbabuena, que ha corrido con la dirección artística de este montaje, explicó que Santo y seña es un espectáculo «sencillo», que parte del intento de recorrer «casi diez años de trayectoria». «Está hecho desde el propio flamenco», aclaró, y por él discurren palos como seguiriyas y mirabrás, entre otros, además de lucir su sello personal en la soleá.

En cualquier caso, dio por sentado que disfrutará bailando con todo, «no con unos ritmos determinados». «Cada vez que salgo al escenario, si tengo que echar en un saco lo que se precisa, no sólo necesito fuerza, sino también plenitud técnica», explicó ante una nutrida representación de seguidores.

Para Santo y seña, su sexto espectáculo con compañía propia, la bailaora ha vuelto a contar con la dirección musical y la guitarra de Paco Jarana, y en escena también intervendrá el tocaor Manuel de la Luz. El cante estará representado por Enrique Soto, Pepe de Pura, Jeromo Segura y José Valencia, mientras que el cuerpo de baile, enteramente masculino, estará integrado por hasta cuatro bailaores.

Para esta amalgama coreográfica retrospectiva, Eva Yerbabuena incluye la seguiriya De la cava, la farruca A las cinco de la tarde, el mirabrás Espumas del recuerdo y las bulerías Rarapata, amén de los ya citados tientos-tangos y de la soleá-bulería que lleva por título Cadencia.

Finalmente, la Sala Compañía acogerá dentro del ciclo Con nombre propio, el espectáculo ConCiertogusto, protagonizado por el baile de Rafaela Carrasco. En un formato mucho más íntimo y recogido a los grandes montajes que suele presentar en el Villamarta, la bailaora y coreógrafa sevillana propondrá una producción en la que desnuda de artificios y tramas.

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