«Cádiz debe luchar contra los 'todo incluido' porque empobrecen la zona»

La firma TUI es el touroperador europeo más importante, por volumen de turistas, en estos momentos. En 2007 movió a más de 20 millones de turistas en Europa, de los que unos cinco millones y medio eran españoles. Emilio Aguilar, el encargado de la zona de Andalucía Occidental, conoce muy bien Cádiz y ofrece un análisis que refleja cómo se percibe esta provincia fuera de las fronteras españolas, sobre todo desde el punto de vista alemán.

-¿Cómo definiría usted el destino Cádiz en estos momentos?

-Es el más innovador. No hay ningún destino peninsular que tenga una plantilla hotelera como la de esta provincia. Afortunadamente, se ha aprendido de los errores ajenos, como de los cometidos en la Costa del Sol. A partir de ahora triunfarán los lugares respetuosos con el medio ambiente.

-¿Se nota esto en la delegación de TUI en Cádiz?

-Por supuesto. La de Cádiz es la oficina que más rendimiento da. No la que tiene mayor volumen de negocio, pero sí la más eficaz.

-¿Alguna estrategia recomendable para los profesionales gaditanos?

-La apuesta por la cultura. El turismo cultural, tan apreciado por británicos y alemanes, hará que la zona tenga buen nombre. Cádiz debe luchar contra la identificación de un destino de sol y playa, y bebidas baratas, porque eso ahuyenta al turismo de calidad. Aunque también depende de cómo se venda porque el sol y playa, asociado a la cultura, tiene mucho futuro para el City Break, esas escapadas de un par de días a una ciudad interesante, que cada vez son más usuales. Pero, sobre todo, es fundamental que no se caiga en buscar al cliente por el cliente, sino que se busque al de poder adquisitivo medio-alto. Que no se caiga en la lucha de precios ni en el turismo de masas.

-¿Cuáles serían las consecuencias de una estrategia poco estudiada o equivocada?

-Pues que entrar en la guerra del turismo barato y de masas sería perder turistas a largo plazo, frente a otros destinos como Turquía o Túnez, que son países con economías emergentes y pueden ofrecer precios más ajustados, aunque aún no han alcanzado la calidad de los destinos nacionales. El modelo de Sancti Petri me gusta. Está creciendo a un nivel muy bueno. Pero, sobre todo, hay que luchar contra los todo incluido porque acaban con el turismo complementario. Si lo hoteles optan por esta forma de negocio, el turista no sale a conocer la zona, ni a comer en restaurantes, ni de tiendas, por lo que el destino acaba empobreciéndose en cuanto a ofertas de ocio y los mismos hoteles acaban cerrando porque dejan de ser atractivos.

-¿Algún obstáculo que debe salvar la provincia?

-Uno, pero es intrínseco al propio destino: el levante. Es difícil explicarle a unos turistas que escogen el litoral gaditano para pasar diez días el hecho de que les puede saltar el levante durante siete.

-¿Cómo se plantea la próxima temporada, ahora que en todos los círculos se habla de recesión?

-La verdad es que según nuestras reservas, este verano se plantea muy bien para Chiclana, Conil y Rota. Hay que tener en cuenta que nosotros trabajamos con mercados internacionales. En Alemania están saliendo ahora de la crisis económica y los touroperadores emisores están enviando datos muy positivos. En el ejercicio anterior trajimos a esta costa .

-¿Trabajan sólo con turistas alemanes en la Costa de la Luz?

-Casi exclusivamente. Los turistas ingleses y alemanes no se pueden mezclar porque cada uno busca un tipo de descanso. El alemán busca tranquilidad y valora mucho el sol y playa combinado con la cultura. Es un turismo que deja riqueza en el territorio. En el caso de Benidorm, por ejemplo, se ha extendido la idea de que es un destino para ingleses y los turistas alemanes lo rechazan. Cádiz debe luchar por que no le coloquen esa etiqueta.

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