Rudy Fernández se ha convertido en el MVP de la Copa. / EFE
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Rudy Fernández conquista la Copa

El campeón del mundo anotó treinta y dos puntos en una final que resultó muy intensa y llena de emoción Los verdinegros consiguieron el título ante el conjunto anfitrión después de once años de sequía

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Once años después, el Joventut volvió a ganar la Copa del Rey, un título merecido que tiene un nombre propio, el de Rudy Fernández. En la que se presume la última Copa del campeón del mundo antes de dar el salto a la NBA, el Joventut dio el golpe en la cancha del Tau, aunque su éxito no es ninguna sorpresa frente al equipo que se presumía favorito, dado el nivel demostrado por el conjunto que mejor y más espectacular baloncesto ha practicado en Vitoria. El cansancio, con tres partidos consecutivos, no fue impedimiento para que el DKV Joventut se proclamase en una intensa final en la que Rudy, autor de 32 puntos, con sólo tres triples, estuvo imparable.

Rudy, el primero que consigue dos títulos de mejor jugador en la historia de la Copa, contó también en la final con la ayuda de otra gran figura con muchísimo descaro, aún más joven, que no se arrugó ante el experto Tau ni ante la presión del Buesa Arena en el momento de la verdad: Ricky Rubio. El genial base verdinegro fue quien sentenció de forma definitiva a un Tau que no pudo sobrevivir en el último cuarto sólo con los triples de Teletovic, aunque el pívot bosnio sí consiguió dar máxima emoción en la recta final. Con 77-78 a poco más de medio minuto para el final, Ricky no rehusó la responsabilidad, entró con su velocidad característica a canasta, le sacó una personal a Rakocevic, y metió los dos tiros libres cuando quedaban 28 segundos. Vitoria entonces rezó para que el triple de Teletovic volviese a poner en ventaja al Tau, pero se estrelló en el aro a falta de 10 segundos, y Mallett tampoco falló sus dos últimos tiros libres. Con el técnico más laureado de la competición, Aíto, que ya lleva cinco Copas, y la sociedad Ricky-Rudy el Joventut vuelve a deslumbrar.

Aunque el Joventut no jugó una buena primera parte, salió enchufado, espoleado por su defensa y dos triples consecutivos de Jagla, pero el Tau llegó a alcanzar una ventaja de 12 puntos en el segundo cuarto (28-16), por su defensa en zona ante la que se estrellaron los verdinegros desde el exterior (2 triples de 15 antes del descanso), y por el físico de Mickeal, Muoneke y McDonald. El Tau consiguió así casi borrar de la cancha entre el final de ambos primeros cuartos a un Joventut descentrado hasta que resurgió Rudy, que provocó una personal y una técnica a Mickeal que se ganó el americano, que llevaba ya bastante tiempo muy picado con el escolta mallorquín. Pese a los pitos del Buesa Arena, Rudy metió los cuatro tiros libres y una canasta, y él solo volvió a meter al Joventut en el partido (30-28). Él fue el único que consiguió romper con sus penetraciones la defensa de un Tau, que dentro también consiguió hacer en el segundo cuarto mucho daño con McDonald en la zona, algo que los locales no lograron en el primer acto.

A triples

Igual que Mickeal había resultado clave para la remontada del Tau en el primer cuarto, su poca cabeza en el segundo supuso un golpe muy duro para su equipo. El Joventut se había tirado seis minutos con sólo un tiro libre y una canasta, y fallando un triple tras otro. El Tau, en cambio, se sentía muy poderoso con su defensa en zona y con McDonald en la pintura, hasta esa técnica trascendental y acercó al Joventut a sólo dos puntos (30-28). El Tau se quejó de esa decisión que consideraba injusta, y su técnico, Spahija, aseguró al final del encuentro que estaba demasiado enfadado como para hablar de los árbitros. El caso es que el Joventut se lo había trabajado, Mickeal cayó en la trampa, y el conjunto catalán recuperó la moral y, pese al rendimiento de Rakocevic y sobre todo Splitter, que se hizo muy fuerte en la zona en el tercer cuarto, consiguió mantener la desventaja de sólo tres puntos (58-55) gracias a Rudy (10 puntos en ese periodo). El Tau, ante la defensa zonal de Aíto, no dejaba de buscar a Splitter dentro y el hispano-brasileño, metiéndolas o sacando faltas, respondía siempre, pero enfrente tenía a un rival sin freno (el mallorquín), y con Ricky dejando su sello ante el veterano Prigioni.

El último cuarto, de máxima emoción, en el que hubo que tener mucho temple, lo resolvieron, no sólo Rudy y Ricky, sino los triples de Mallet y Jagla, frente a la ametralladora Teletovic, pero el Tau, que volvió a ponerse por delante (72-71), no tenía mucho más. Sergi Vidal intentó secar a Rudy y lo logró durante un tiempo, igual que el Tau rompió la zona del Joventut con Teletovic, pero el catalán luego no pudo frenar al balear, para que el Joventut cerrase su brillante participación en Vitoria. El triunfo del equipo de Badalona tiene aún más mérito, porque también tuvo que luchar contra la historia, ya que no ganaba en la capital alavesa desde 1999, ante un Tau que conquistó las tres últimas Copas en año par: 2002, 2004 y 2006. La de 2008 estaba destinada al mejor.