«Voy poco a poco pues un mal paso te deja un año en blanco»
Toboso regresa al Cádiz B tras una difícil temporada en el Sanluqueño «donde pedí lo que me debían y dijeron muchas mentiras de mí»
Actualizado: Guardar-Ha pasado más de un mes de su regreso al Cádiz B, ¿cómo lo valora?
-Poco a poco voy cogiendo la dinámica del grupo y ya soy uno más. Estoy aportando mi granito de arena y la idea es ir paso a paso.
-¿Mucha diferencia con los equipos en los que ha estado últimamente?
-Aunque sea un filial, a fin de cuentas las entidades las llevan personas, y los entrenadores tienen su propio estilo. El cuerpo técnico que tengo es muy competente.
-¿Un filial trabaja de forma diferente?
-El ambiente es distinto porque los chavales no han salido todavía y no han decantado su camino. Su concepto de fútbol es diferente. En otros equipos, los jugadores ven el fútbol más como una profesión que una ilusión, tu medio de vida.
-Usted es profesional.
-Estoy jugando como profesional pero con un salario normal dentro de un filial, similar a un compañero o menor. En otros clubes sí que he sido profesional, pero aquí prima la ilusión.
-¿Y por qué ficho por el Cádiz?
-Raúl Procopio quería que estuviese aquí, yo quería entrenar con él, y además la ilusión es lo último que se pierde. Añoraba esa emoción de jugar en un filial.
-Y para subir al primer equipo.
-Me gusta ir día a día y no hacer castillos en el aire.Existe esa posibilidad, y todo el mundo tiene intención de superarse, pero aún no he cogido el ritmo.
-Es un trotamundos del fútbol.
-Sí, y eso te hace diferente. Haces muchos amigos, te quedas con lo bueno y siempre olvidas lo malo.
-¿Cuál es su peor recuerdo?
-El final de temporada del año pasado en el Sanluqueño debido a los problemas económicos. Reclamé el dinero que me correspondía y sólo se dijeron mentiras sobre mí. ¿Cómo es posible que un jugador que marcó 15 goles luego no tuviera equipo en Tercera? Pasaron informes muy negativos de mí.
-¿Cuál es su sueño?
-Disfrutar de los minutos que tenga y que me lleven a conseguir lo que Dios quiera. Voy poco a poco porque un mal paso te deja un año en blanco.