El presidente estadounidense, George W. Bush, y el presidente palestino, Mahmud Abbas, pasan revista a la guardia de honor palestina a la llegada del mandatario estadounidense a la 'Muqata'. /EFE
gira por oriente próximo

Bush señala Jerusalén como el gran desafío para el futuro Estado palestino

El presidente de EEUU asegura que la Autoridad Nacional Palestina e Israel deberán "hacer elecciones duras" para posibilitar un acuerdo de paz

RAMALA Actualizado: Guardar
Enviar noticia por correo electrónico

El presidente de EEUU, George W. Bush, ha asegurado en Jerusalén que tanto la Autoridad Nacional Palestina (ANP) como Israel deberán "hacer elecciones duras" para posibilitar la creación del futuro estado palestino. Asímismo, ha señalado Jerusalén, disputada por ambos como su capital, como "uno de los desafíos más difíciles en el camino hacia la paz".

El mandatario estadounidense, que inició ayer con su llegada a Israel una gira por Oriente Próximo para impulsar las negociaciones de paz comprometidas en la conferencia de paz de Annapolis, ha instado a la ANP a combatir el terrorismo y ha insistido en la necesidad de que Israel ponga fin a la ocupación de los territorios palestinos, aunque ha matizado que el futuro estado palestino debe reflejar "la realidad" sobre el terreno.

Bush ha utilizado dos palabras cargadas de significado, al hablar de "ocupación" y llamar "Palestina" por primera vez al futuro estado que emerja, junto a Israel, en Tierra Santa. Asímismo, ha sugerido dar compensaciones económicas a los 4,4 millones de refugiados palestinos -según cifras de la ONU-, que reclaman volver a los hogares que ellos o sus padres o abuelos dejaron en lo que ahora es Israel durante la guerra de 1948.

En una declaración desde el Hotel Rey David en Jerusalén, donde se aloja desde ayer, Bush ha resaltado que el resultado de las conversaciones debe ser un estado que será la patria de los palestinos, mientras que Israel es la patria de los judíos, ha explicado. "Estas negociaciones deben garantizar que Israel tiene fronteras reconocidas internacionalmente y seguras, y deben garantizar que el estado de Palestina es viable, contiguo, soberano e independiente", ha afirmado Bush.

Previamente, el presidente de EEUU se había mostrado convencido en Ramala de que israelíes y palestinos firmarán un acuerdo de paz en el plazo de un año, es decir antes del fin de su mandato, en la que se constituye como la primera visita de un mandatario estadounidense a la ciudad palestina enclavada en Cisjordania.

El respaldo de EEUU

Así, el mandatario estadounidense ha asegurado que "confío en que con la ayuda adecuada, el Estado palestino emergerá", expresando su disposición de prestar tanto respaldo político como económico para ello, aunque ha advertido que Abbas y el primer ministro palestino deben "hacer elecciones duras".

En este sentido, Abbas ha resaltado que Bush es el primer presidente estadounidense que se compromete plenamente a respaldar un Estado palestino. Asimismo, ha instado al presidente de EEUU a presionar a Israel para que suavice las restricciones de seguridad en Cisjordania y detenga la construcción de asentamientos judíos.

Ante esta petición, Bush ha señalado que Israel también debe garantizar que el futuro Estado palestino tiene una continuidad territorial. Ayer, durante su visita a Israel, Bush solicitó al primer ministro israelí, Eduh Olmert, que elimine sus enclaves ilegales en Cisjordania y hoy ha instado al país a no emprender acciones que minen a las fuerzas de seguridad de Abbas, que Washington espera sea el pilar de un futuro Estado democrático.

Una visita "histórica"

Bush ha realizado su discurso bajo un retrato de Yaser Arafat, el líder palestino con el que se negó a reunirse y que murió en 2004, tras dos años en los que fuerzas israelíes lo mantuvieron sitiado en la Mukata, la sede presidencial. Arafat está enterrado en el mismo complejo, pero Bush no visitó el mausoleo.

Abbas ha recalcado que la visita de Bush a los territorios palestinos es "histórica" y ha dicho que el deseo de su pueblo es vivir en libertad, sin "muros de separación ni asentamientos" israelíes. El presidente de EEUU se ha convertido en el primer presidente estadounidense en visitar la sede del Gobierno palestino. Su antecesor, Bill Clinton, también estuvo en los territorios palestinos en 1998, aunque no en Ramala.

El presidente estadounidense ha dicho entender la "frustración" de los palestinos por causa de los puestos de control israelíes, pero ha destacado que "la seguridad del estado es esencial". El presidente ha recalcado la importancia de reforzar las fuerzas de seguridad palestinas y ha señalado que en la medida en que Israel las ha debilitado, "eso es algo en lo que discrepamos".