Opinion

Enredo castrista

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as afirmaciones de Raúl Castro asegurando que su hermano Fidel se restablece de su larga convalecencia, que se le consultan las decisiones «trascendentales» sobre Cuba y que optará en enero a ser diputado constituyen un nuevo motivo de confusión no sólo sobre la capacidad del líder del régimen para seguir comandándolo, sino sobre el futuro proceso de transición en la isla. La confianza exhibida por el jefe del Estado en funciones en la recuperación de Castro resulta incompatible con la reciente y críptica alusión de éste a la posibilidad de ir preparando el camino para su relevo en el poder. Sin embargo, es precisamente esa sucesión de mensajes, gestos y actuaciones de equívoca interpretación la que parece alimentar la esperanza de los prohombres del régimen en poder continuar dirigiéndolo indefinidamente.