Paros de tres meses para contener la situación
Detener el proceso productor en las fábricas durante tres meses es una de las medidas que barajan ya las empresas del ladrillo. También está sobre la mesa la posibilidad de acometer despidos y regulaciones de plantillas «porque algo habrá que hacer», asegura el responsable de una de ellas. Pero no sólo las cerámicas industriales sufren crisis.
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Las fábricas cementeras igualmente comienzan a resentirse. Es el caso de 'Lafarge', segunda productora de cemento de España situada en Villaluenga de la Sagra (Toledo). Su previsión de negocio para 2008 se ha reducido un 10%, después de años excepcionales. Su director, Raúl Pérez, aún mantiene cierto optimismo. Afirma que «esto es más bien un reajuste porque los niveles de consumo de cemento en España eran muy altos con respecto a otros países europeos y en algún momento debían reajustarse». Además, explica que cuando se acercan elecciones, suelen detectarse desaceleraciones seis meses antes y después de los comicios.
