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El PP atribuye la «pérdida de cohesión» al interés por parte del Gobierno de «reabrir heridas»

Los diferentes partidos políticos valoran el tradicional mensaje navideño de Don Juan Carlos

MADRID Actualizado: Guardar
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El Rey ha reafirmado, durante su discurso tradicional de Navidad, su "profundo y permanente compromiso de servicio y de entrega a España y a todos los españoles" al mismo tiempo que ha pedido la unidad de los demócratas para luchar contra el terrorismo.

Leopoldo Barreda, portavoz del PP vasco

Para el PP, Don Juan Carlos ha hecho un llamamiento "muy claro" a recuperar la cohesión interna "de nuestra sociedad y nuestras fuerzas políticas, en torno a nuestras instituciones y en torno a las grandes cuestiones nacionales". "Esta pérdida de cohesión, que ha sido la característica de una legislatura dedicada por parte del Gobierno a reabrir heridas, en lugar a mantener el consenso de la transición, es un llamamiento importante en boca del Rey ".

Barreda ha manifestado que el Mensaje de Navidad del Rey "tiene contenidos que deben hacer reflexionar a cualquier demócrata en el momento que está viviendo España". Ha resaltado tambiénlos llamamientos del Monarca a la lucha contra el terrorismo "en este año, entre la T4 y los asesinatos de Capbreton". "Son importantes para todos las muestras de afecto a las víctimas y la petición de agruparnos todos en torno al Estado de derecho, lo que contrasta abiertamente con la actitud de un Gobierno como el que preside el señor Ibarretxe".

Asimismo, ha dicho haberle "llamado la atención especialmente" en el mensaje del Rey el reconocimiento de problemas graves "que estamos viviendo como el empleo o la vivienda", y la referencia a la calidad en la Educación. En su opinión, ésta es la "constatación clara de lo que ya es una diagnóstico prácticamente unánime y el Rey se hace eco de esa preocupación que está en la mente de una inmensa mayoría social en España y es un llamamiento oportuno para 2008".

Mikel Arana, portavoz EB

Arana ha remarcado que el discurso del Rey es "retrógrado y reaccionario" como también lo es "la propia institución monárquica" ya que, en el siglo XXI "no tiene legitimidad democrática porque no ha sido elegida libremente por la ciudadanía en consulta popular".

La intervención del Rey está "pensada para los poderes fácticos y responde a los intereses del Gobierno socialista, el Ejército y las grandes empresas". A su juicio, la defensa que el Monarca hace de la Constitución y la unidad frente al terrorismo "implica, de facto, la negativa a reconocer el derecho a decidir y también la negativa a impulsar el diálogo democrático como vía de resolución del conflicto".

"Se trata de un discurso que tiene como objetivo impulsar la alianza estratégica PSOE- PP contra el derecho a decidir y contra el diálogo democrático".

Joan Ridao, portavoz de ERC en el Parlament

Ridao ha echado de menos en el mensaje del monarca referencias al modelo territorial del Estado como "tema no resuelto en la actual legislatura y con un Estatut como el catalán pendiente de una sentencia del Tribunal Constitucional".

También ha reprochado a Don Juan Carlos que hiciera alusión al proceso de paz en el País Vasco sólo como una "cuestión de lucha antiterrorista". "No se puede reducir únicamente" a eso.

Gaspar Llamazares, coordinador general de Izquierda Unida

Para Llamazares, el discurso de Navidad del Rey "despide un aroma en exceso triunfalista y electoral", mientras que echó de menos un "mayor realismo en relación a la situación de España".

"Se echan de menos referencias a la situación de la juventud en la precariedad laboral, a la desigual distribución de la renta, la injusticia social y la pobreza, así como referencias a retos tan importantes como la inmigración o el cambio climático, de lo que no hay prácticamente nada".

Josu Erkoreka, portavoz del PNV en el Congreso

Erkoreka aprecia en el discurso del Monarca "un canto a las excelencias del marco constitucional" y añadió que "evidentemente", como nacionalista vasco, tiene matices que hacer a la valoración "netamente positiva que el Rey hace de lo que ha dado de sí este marco constitucional durante los últimos 30 años".

El portavoz jeltzale señala que hay algunos pasajes de las palabras del Monarca que "adquieren especial relieve" como consecuencia del atentado de ayer en Balmaseda. "Justo en el momento en el que el Rey lanzaba su discurso por televisión, explotaba una bomba puesta por ETA en la sede del PSE-EE en Balmaseda", ha recordado.

En su opinión, el atentado hace que "cobre especial protagonismo" la preocupación expresada por el Rey en torno al terrorismo, la gravedad del fenómeno y, "sobre todo, las dificultades que parecen existir entre los partidos políticos para que pueda abordarse este fenómeno tan grave y tan enormemente dañino para la convivencia y la sociedad, desde claves de sintonía y de unidad".

Mikel Irujo, secretario de Comunicación de EA

"Echamos en falta la palabra clave, que es esperanza. El 2007 ha sido un año complicado, especialmente el segundo trimestre, ya que hemos visto que se vuelven a producir escenas de violencia, ETA ha vuelto a las armas, se están produciendo unos sumarios, unos macroprocesos que desde luego no están ayudando nada a la normalización política de este país. Lo que queremos destacar es la esperanza, la esperanza para el 2008, una esperanza que no se puede encarcelar, ni secuestrar ni asesinar".

Josep Antoni Duran Lleida, portavoz de CiU en el Congreso

Las palabras del Rey "resumen bien lo que ha sido la legislatura, y al mismo tiempo, ha reivindicado el espíritu de la transición, frente a la confrontación que protagonizan los dos grandes partidos españoles, PSOE y PP".

"Este espíritu de la transición -ha añadido Duran- ha sido abandonado por esos partidos, mientras que CiU siempre ha defendido la necesidad de mantener actitudes de diálogo y de consenso". Respecto al llamamiento a la unidad de los partidos en contra de ETA, Duran Lleida ha indicado que el Rey "ha hecho una apelación a una unidad que no ha existido en esta legislatura, especialmente porque el PP ha utilizado este tema como elemento de confrontación partidista".