El instinto maternal de 'La Negra'

Brian Rincón Arias tenía poco más de tres años cuando el 15 de junio fue entregado a las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC). Seis meses después despertó el instinto maternal de su carcelera, una guerrillera conocida como 'La Negra', hasta el punto que la mujer ha arriesgado su vida para desertar y huir con el menor por la selva para devolverlo a sus jóvenes padres. El pequeño fue recogido de una guardería de Cúcuta, a unos 400 kilómetros al noreste de Bogotá, por un pariente enfrentado con su familia. Como venganza lo entregó a la guerrilla, que no desaprovechó la oportunidad para exigir a sus padres unos 170.000 euros. Pero las FARC no contaban con el instinto maternal de 'La Negra'. La guerrillera, del frente 10, que opera en la región de Arauca, en la frontera con Venezuela, y el niño establecieron pronto un vínculo afectivo que quedó demostrado cuando el pequeño la buscaba y la besaba en presencia de los militares que la recibieron en una base militar de Arauquita después de que caminara durante veinticuatro horas con Brian en brazos. Gracias a su gesto, la rebelde podrá beneficiarse de la Ley de Justicia y Paz que contempla las reinserciones en la sociedad.

Brian Rincón Arias no estaba en la lista de los tan nombrados 45 'canjeables' que el grupo dirigido por Manuel Marulanda 'Tirofijo' quiere cambiar por quinientos guerrilleros presos. Tampoco sus padres han sido reci- bidos por el presidente de Venezuela, Hugo Chávez.

Sin embargo, además de los políticos, como la ex candidata presidencial Ingrid Betancourt, militares y tres ciudadanos estadounidenses, las FARC tienen más de setecientos ciudadanos privados de su libertad por los que exigen rescate económico. Según la Fundación País Libre, que apoya psicológicamente a los familiares, en lo que va de año han sido secuestrados 393.