Un grupo de viajeros espera en una de las estaciones para coger un autocar alternativo. / EFE
cuarta jornada sin trenes

El gobierno catalán no garantiza asumir el Cercanías en el plazo fijado

Carod asegura que, actualmente, el gobierno catalán "no está en condiciones" de garantizar que la fecha se mantenga

BARCELONA Actualizado: Guardar
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El gobierno catalán ha asegurado que no garantiza que el proceso de traspaso del servicio de Cercanías de Renfe a la Generalitat comience el 1 de enero, en el plazo fijado, y que contempla la posibilidad de solicitar una "auditoría independiente" antes de asumir su gestión.

Así lo ha dicho el vicepresidente del gobierno catalán, Josep Lluís Carod-Rovira, tras la reunión del consejo de seguimiento e impulso del Estatut, órgano en el que están representados todos los partidos catalanes.

Carod ha afirmado que dada la situación del servicio de Cercanías de Renfe, hoy por hoy, "no se dan las condiciones para que el traspaso se pueda efectuar", puesto que este servicio "no funciona" y sería como asumir "un problema".

El vicepresidente del gobierno catalán ha explicado que, formalmente, la fecha del 1 de enero para iniciar el traspaso de Cercanías no ha variado, y ha opinado: "Ojalá fuera posible mantener la fecha". Sin embargo, Carod ha añadido que actualmente el gobierno catalán "no está en condiciones" de poder garantizar que la fecha se mantendrá.

Modificaciones en el carril adicional

El Servei Català de Trànsit (SCT) ha pedido a los usuarios habituales de Renfe y de los Ferrocarrils de la Generalitat (FGC) que confíen en los autobuses substitutivos y los que han escogido en los últimos días el vehículo particular usen el transporte público. Sin embargo, mañana se modificarán el carril adicional y el carril bus que se han establecido en la autovía C-31 y que han provocado retenciones muy importantes.

El director del SCT, Josep Pérez Moya, ha comparecido esta tarde para explicar los atascos de incluso 13 kilómetros que se alargaron hasta casi el mediodía. Pérez Moya ha admitido que las medidas no han funcionado correctamente y que los conductores han tardado hasta hora y media para ir de Gavà a Barcelona.

Cuarto día de colas y esperas

Este anuncio se produce en el cuarto día que vive Barcelona sin dos importantes líneas de cercanías de Renfe y en el que los accesos a la ciudad condal desde el Baix Llobregat, como la C-31 y la C-32, han registrado esta mañana largas colas de vehículos que han superado los quince kilómetros en varios tramos desde Castelldefels.

El Servicio Catalán de Tráfico informa hoy que la carretera más afectada es la C-31, donde el carril bus establecido para facilitar el acceso de los autocares alternativos a los trenes de cercanías cortados registra unos 16 kilómetros de colas desde Castelldefels. También se producen retenciones desde el punto kilométrico 180 a la altura de El Prat de Llobregat hasta el 190 si bien ya desde Gavá se producen colas destacables de otros catorce kilómetros en el carril en sentido contrario habilitado con conos en Gavá.

Los turismos han comenzado a ocupar el carril bus habilitado en la C-31 para los autobuses alternativos al servicio de cercanías cortado, dado el atasco de vehículos en esta vía. Debido a esta intensidad en la circulación, los Mossos d'Esquadra han optado por cerrar el acceso desde esta vía hacia la autopista C-32 para no acentuar el colapso circulatorio de ambas carreteras.

Aparte de las retenciones que se producen en las dos principales vías de acceso a Barcelona desde la comarca del Baix Llobregat, la C-32 y la C-31, también van muy cargadas las carreteras secundarias que transcurren por esta comarca, como la que va de Sant Boi a Castelldefels.