Vox fuerza a la Junta de Andalucía a agilizar las auditorías del sector público

Es su principal exigencia en la negociación para el Presupuesto 2020

El portavoz de Vox en el Grupo Parlamentario, Alejandro Hernández EP

A. R. Vega / S. Benot

El grupo parlamentario de Vox está más cerca de estampar su firma en el Presupuesto de la Junta para 2020 porque las negociaciones con el Gobierno andaluz de PP y Ciudadanos están encarriladas hasta el punto de que la propia formación reconoce que se han cumplido el 85% de sus demandas.

El Gobierno andaluz se ha comprometido con Vox a sacar a contratación las auditorías de todos los entes instrumentales de la Junta de Andalucía en los próximos días. Antes de que se voten los presupuestos autonómicos para 2020, estarán en marcha los concursos para encargar estos trabajos a consultoras externas . Ésta era una de las «líneas rojas» que los diputados del Vox habían puesto para apoyar las segundas cuentas del centro derecha en casi 38 años y que ha aceptado el Ejecutivo autonómico, según confirmaron a ABC distintas fuentes.

El objetivo es que estas auditorías, que deben estar terminadas en el plazo máximo de seis meses, marquen la hoja de ruta para eliminar duplicidades y reajustar la estructura y el personal del conjunto de sociedades, agencias, fundaciones y consorcios que componen la denominada administración paralela de la Junta. Una remodelación que incluye posibles despidos. «No queremos que se quede en una declaración de intenciones sobre el papel, sacar las auditorías es una condición sine qua non para nosotros», sostienen desde Vox. La idea, aseguran, es licitarlas las próximas semanas.

Pero no es la única demanda de esta formación para apoyar las cuentas del Gobierno de Juanma Moreno. Vox también ha pedido un fondo para indemnizar a los agricultores sin seguro y que han sido afectados por la reciente gota fría que cifran entre 10 y 15 millones de euros.

Combatir la inmigración iregular

Otra demanda es la creación de una Oficina para combatir la inmigración irregular, lo que necesitaría de la firma de un convenio con la Policía y la Guardia Civil, una petición que está pendiente de «su encaje jurídico» pero que tiene serias dificultades políticas en este momento, con el Gobierno central en funciones.

A pesar de estos avances, Vox no ha despejado del todo la duda de si presentará o no una enmienda a la totalidad de las cuentas y pedirá que se devuelvan al Gobierno, un veto que sí presentarán tanto el PSOE como Adelante Andalucía . Sería un elemento más de presión para la negociación ya que esta enmienda tendrían que mantenerla o retirarla antes del próximo miércoles. Vox entiende que tendría así una semana más para negociar con el Gobierno andaluz.

Dicha enmienda está ya redactada si bien la intención del grupo parlamentario era no presentarla lo que ocurrirá salvo que desde Madrid, los jefes de Vox (ayer Santiago Abascal estaba en Córdoba y Espinosa de los Monteros en Sevilla) tomen la decisión contraria. El plazo termina esta misma mañana.

Lo que sí tienen claro en Vox es que quieren todos los acuerdos redactados con claridad, por escrito y con la firma de PP y Ciudadanos. Temen que el resultado de las elecciones generales del 10N, sobre todo si se confirma el anunciado descalabro de la formación naranja , afecte a los compromisos del Gobierno andaluz. Un documento concreto daría menos margen de maniobra política al Ejecutivo regional, al margen de las tensiones internas que pueda sufrir en el futuro.

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