Agua encharcada en un olivar tras la lluvia
Agua encharcada en un olivar tras la lluvia - ABC
AGRICULTURA

La lluvia caída salva al olivar de Córdoba

Los malos augurios por la sequía se disipan y se espera ya una cosecha dentro de la normalidad

CÓRDOBA Actualizado: Guardar
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Ha llovido lo justo y de la forma adecuada para salvar la campaña de la aceituna en la provincia. Así lo indican los agricultores consultados por ABC, que resaltan que la lluvia de los últimos días ha cambiado por completo el panorama actual. Los malos augurios por los meses de sequía, con unos frutos en árbol sin calibre ni calidad, han quedado disipados con el agua caída.

Así lo señala el presidente de la Unión de Pequeños Agricultores (UPA), Miguel Cobos, quien indica que en los próximos días «la aceituna, que ahora mismo está arrugada, empezará a engordar y los árboles tendrán mejor aspecto».

Además, la forma en la que ha caído el agua ha sido totalmente beneficiosa para los olivares, ya que ha sido débil, intermitente y, por lo tanto, no ha supuesto daños ni a los árboles ni a los frutos.

El presidente de UPA indica que, según la información que maneja, el último frente lluvioso en la provincia ha dejado entre 40 y 90 litros por metro cuadrado, dependiendo de las comarcas. A ello hay que sumar los 20-30 litros que se registraron el pasado 12 de octubre, con lo que las explotaciones olivareras «han mejorado mucho». Sobretodo en los cultivos de secano, que venían sufriendo cuatro meses de sequía ininterrumpida.

Así, el presidente de UPA espera que al final se lleguen a las 270.000 toneladas de aceite, la cifra de «una campaña dentro de lo normal».

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El agua caída, «aunque algo tarde es muy positiva para el olivar». Así lo indica el presidente de la patronal agraria Asaja, Ignacio Fernández de Mesa. Al respecto, señaló que si el otoño «se comporta y tiene unos niveles de pluviometría adecuados, estamos hablando de una campaña de aceituna para aceite normalizada». Las previsiones, hace dos semanas, no eran las mismas ante las olas de calor en septiembre y las elevadas temperaturas con las que arrancó octubre.

Para la que ha llegado demasiado tarde y sin esperanzas ha sido para la aceituna de verdeo, «que está prácticamente liquidada», señaló Fernández de Mesa.

El presidente de Asaja Córdoba indicó que esta lluvia no servirá para aumentar la calidad y el calibre de la aceituna de verdeo «puesto que empieza a ponerse ya morada y no sirve».

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