El Hospital San Juan de Dios de Córdoba interviene con éxito un tumor nasal mediante microcirugía

El servicio de Cirugía Maxilofacial del Hospital San Juan de Dios de Córdoba , encabezado por el doctor Alberto Candau , ha intervenido con éxito un tumor nasal que ha requerido la reconstrucción de parte de la cara, mediante microcirugía . El paciente ya ha sido dado de alta y continúa recibiendo tratamiento por el servicio de oncología del centro.

Según explica el doctor Candau en una nota enviada por el centro hospitalario, el paciente presentaba una tumoración con un diámetro de 7 centímetros que le afectaba a los dos ojos y parte del labio . «Además de limpiar del cáncer todo el centro de la cara, tuvimos que limpiar los gánglios del cuello y realizar un autotrasplante microquirúrgico de la región anteromedial del muslo (AMT), con el que procedimos a la reconstrucción facial».

El paciente, según cuenta el especialista, llegó en una situación muy delicada, por la extensión que tenía el tumor por toda la cara, donde además no dejaba de expandirse, por lo que el caso se llevó a estudio al Comité de Tumores con el que cuenta el Hospital cordobés, donde se analizaron todas las circunstancias y se vio la cirugía como la opción más idónea para su recuperación.

Esta ha sido la primera intervención realizada con éxito en este servicio mediante microcirugía , una disciplina quirúrgica que permite transferir tejido de una parte del cuerpo a otra, mientras se garantiza la perfusión del tejido trasplantado. Se trata de una técnica compleja, de alta dificultad, que requiere máxima precisión y de instrumental especializado , como un microscopio quirúrgico, para ofrecer todas las garantías, explican desde el centro hospitalario de la orden religiosa.

La creación de esta sección de microcirugía en el servicio de cirugía maxilofacial del Hospital San Juan de Dios de Córdoba está apoyada por la incorporación de la doctora Mabel Falguera . Su formación y experiencia permitirán la realización de intervenciones que requieran de esta precisión y que posibiliten el tratamiento de oncología compleja de cabeza y cuello , así como parálisis facial; secuelas de traumatismos; quemaduras y malformaciones congénitas; así como otras patologías como la microcirugía en cefalea y la microcirugía de linfedema, tan frecuente tras el cáncer de mama.