CÁDIZ
Las obras de la línea ferroviaria Algeciras-Bobadilla y del tranvía de la Bahía, paralizadas por el Covid-19
El 50% del paro registrado en la provincia pertenece al sector de la construcción; la Federación de Constructores y Promotores pide mayor planificación en la vuelta a la normalidad
La crisis sanitaria generad por el Covid-1 9 ha causado también estragos en el sector de la construcción en la provincia de Cádiz, algo que comenzó con la aprobación del Estado de Alarma y que ha terminado de golpear el Real Decreto Ley del 29 de marzo por el que se han paralizado todas las actividades consideradas no esenciales. La construcción, que empezaba a remontar, ha quedado paralizada.
En lo que se refiere a obra pública, una de las actuaciones más importantes para la provincia de Cádiz, especialmente para el Campo de Gibraltar y el Puerto de Algeciras , son los trabajos de renovación en la línea ferroviaria Algeciras-Bobadilla , que han quedado temporalmente suspendidos tras dicho decreto según ha confirmado Adif a este diario.
Dichos trabajos, que hasta el 29 de marzo se ejecutaban con normalidad, podrían recuperar su ritmo de trabajo habitual en un plazo no muy dilatado, según Adif , que destaca además que hay que tener en cuenta dos factores que reducen el impacto de esta medida del Gobierno: «Por un lado, el periodo establecido para la paralización coincide en parte con la Semana Santa , un periodo tradicionalmente inhábil para el sector de la construcción; y, por otro, que dicho permiso retribuido para los trabajadores de las distintas contratas tiene carácter de recuperable. Así que esperamos que los trabajos puedan reanudarse sin pérdida apreciable de tiempo».
Adif añade que desde el punto de vista contractual, este Real Decreto no tiene ningún efecto y que, por lo tanto, la relación entre Adif y las empresas contratistas no sufre ninguna alteración , ya que no se produce suspensión alguna de los contratos en ejecución.
Otra obra pública importante en la provincia que ha quedado paralizada es la del tranvía de la Bahía de Cádiz, según ha confirmado la Consejería de Fomento de la Junta de Andalucía. En concreto, ha explicado que las pruebas han quedado suspendidas en estos días, aunque añade que sigue trabajando en las contrataciones de servicios que faltan para su puesta en marcha.
Emergencias y conservación de carreteras
Todas las obras de l a Consejería de Fomento en esta provincia han quedado paradas excepto las de emergencias y conservación de carreteras, que siguen en marcha «para garantizar la seguridad vial».
Otras obras paralizadas en la provincia son la actuación en los túneles de la A-381, en concreto para la adecuación a la normativa de los sistemas de seguridad de los túneles de la autovía Jerez-Los Barrios.
También lo están las del carril bici A-2233 dentro de la Ruta Eurovelo 8, en concreto la conexión ciclista que conectará Conil-Los Caños ; así como del carril bici en el Parque de los Toruños.
Lo mismo sucede con todas las obras de la Agencia Pública de Puertos de Andalucía, como son del puerto-ciudad Barbate, Rota, nuevo acceso puerto de Chipiona y obras en puerto de Conil.
Hay obras de dragados en marcha , como las del puerto de Barbate o en el puerto de Algeciras.
Un duro golpe para la construcción
La Federación de Constructores y Promotores de la Provincia de Cádiz prefiere no dar cifras sobre la repercusión de la actual situación en el sector porque aún no hay datos exactos ni un escenario suficientemente fiable para hacerlo «y creemos que aún no es responsable. De lo que se trata es de salir de esta situación con la mayor normalidad posible», asegura Jorge Fernández , secretario general de dicha federación.
Pese a ello, es evidente que el impacto del Real Decreto ha sido muy importante y supone cerca de un 50% de las últimas cifras del paro en la provincia. « El impacto cerca del 50% del paro en la provincia en nuestro sector según nuestros datos », explica Fernández, que indica que muchas empresas de la provincia habían solicitado ya ERTEs y otras muchas se encuentran en el actual periodo de permiso retribuido recuperable.
«La cuestión está en ver cuánto dura esta situación. Lo que le pedimos a la Administración es que, esta vez, el tránsito hacia un cambio de escenario se haga de una manera más programada y planificada dentro de lo posible. La Federación comprende perfectamente que el objetivo número uno de todos en conjunto es luchar contra la crisis sanitaria que tenemos; comprendemos la situación de excepcionalidad que se vive en todos los órdenes y también en el Gobierno a la hora de ir tomando decisiones, pero lo cierto es que ha habido unas dosis de improvisación muy importantes y un sector como el de la construcción no se puede parar de la noche a la mañana ni se puede esperar que se reactive igual. Hay que hacer acopio y retirada de materiales, tomar medidas de seguridad en edificios en fase de construcción etcétera…, que no se solventan en 24 horas. Desde que se dice ponte en marcha hasta que podamos hacerlo pasa un tiempo que es el que pretendemos que si es factible, se pueda ir previendo», explica.
En cuanto al análisis de la repercusión en la provincia de Cádiz, desde esta federación se asegura que en el subsector de rehabilitaciones y reformas , integrado por empresas muy pequeñas, gran parte de ellas micro-pymes, «la mayoría estaban subsistiendo como podían, con unos márgenes muy estrechos, y se van a ver muy afectadas ahora. Son empresas con poco músculo y lo que el Gobierno ha establecido son medidas que las llevan a endeudarse más . Mucho me temo que si esto se prolonga demasiado, muchas de ellas pasarán serias dificultades», indica el secretario general.
En cuanto a la edificación, explica que el constructor trabajaba ya con unos márgenes muy estrechos «y hemos llegado a decir que el constructor puro y duro realmente nunca había terminado de salir de la crisis anterior y que estaba resistiendo a base de volumen de obra. Estaba además empezando a tener problemas derivados de la escasez de mano de obra y el encarecimiento de los materiales».
En contratación pública, según la Federación, la inversión estaba en unos niveles que, «aunque habían mejorado en los últimos años, seguían estando por debajo de lo que se entiende normal ».
Respecto al sector promotor residencial , se explica que iba funcionando mejor «porque la demanda en la provincia se estaba comportando de una forma saludable y aunque había iniciado un proceso de desaceleración estaba dentro de los parámetros normales».
Por eso, será determinante conocer hasta cuándo se prolongará esta situación para evaluar su verdadero impacto: «Si la situación de paralización en la que estamos no dura más allá de lo que parece razonable, asumiendo una posible prórroga más allá del 11 de abril y el sector de la construcción está condiciones de volver a la normalidad en mayo , tiene cuatro meses por delante para tratar de coger velocidad y a lo mejor, en el último trimestre del año, puede estar, sino a pleno rendimiento, sí a uno aceptable. Si esto es así, el impacto es inevitable pero la recuperación será más fácil en 2021. Si la crisis sanitaria se alarga mucho más de lo que se espera las consecuencias, evidentemente, serán mucho más graves », sentencia Fernández.
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