El día de la riada mortal: no llovía tanto en Cataluña en una sola jornada desde 1943

El trágico temporal de las últims jornadas que causó este martes 3 de noviembre cuatro muertos y cinco heridos y cuantiosos daños materiales en Cataluña ha dejado registros de lluvia históricos en muchos lugares del altiplano central de Cataluña, donde no llovía tanto en un sólo día al menos desde 1943.

Según el balance del Servicio Meteorológico de Cataluña (SMC), en el observatorio de Santa Coloma de Queralt (Tarragona) recogieron 137,6 litros por metro cuadrado, una cifra que supera los 135 litros que se midieron el 14 de diciembre de 1943.

En el municipio de Cervera (Lérida), donde el lunes cayeron 75,3 litros por metro cuadrado, no llovía tanto desde el 7 de mayo de 1970, mientras que en Calaf (Barcelona), donde recogieron 75 litros por metro cuadrado, no diluviaba en tanta cantidad desde el 11 de octubre de 1970. También en La Panadella, en la frontera entre las provincias de Barcelona, Lérida y Tarragona, donde cayeron 135,8 litros por metro cuadrado, ha batido su récord histórico de precipitación que era de 78 litros el 29 de noviembre de 2014, es decir, ayer llovió el doble.

La excepcionalidad de las copiosas lluvias se extendió también a otros lugares, como en el parque natural de Els Ports de Besseit, en Tortosa (Tarragona), que fue el lugar donde cayó más agua, un total de 220,7 litros por metro cuadrado.

En otros lugares, como Pinós (Lérida), con 77,4 litros, no llovía tanto desde el 18 de agosto de 1995, y en Raimat, con 62,9, batió su anterior récord que era de 57,9 litros el 14 de octubre de 1996.

La lluvia recogida, por ejemplo, en 12 horas en Sant Salvador de Guardiola (Baarcelona) y en la Panadella supuso más de la mitad de la que había caído en los últimos 10 meses.

En cuanto a la cota de nieve, ha sido muy alta a lo largo del episodio (en general superior a los 2.500 metros), aunque durante la madrugada del martes ha tendido a bajar hasta los 2.200 metros en el Pirineo occidental. La estación de Boí (2.535 m, Alta Ribagorça) ha registrado un espesor de nieve nueva de 9 centímetros, según el SMC.

En cuanto al viento, la estación de La Tosa d'Alp, a 2.500 metros de altura, fue la que registró la racha de viento más intensa, de 132,1 kilómetros por hora, mientras que en Ulldeter, a 2.410 metros de altura, se midió una racha de 124,9 kilómetros por hora. 

En la estación de Horta de Sant Joan (Tarragona), que registró una racha de 109,1 kilómetros, hacía más de 8 años (7 de marzo de 2007) que no medía un viento tan fuerte. Este viento de componente este provocó una importante alteración marítima, con olas de más de 2 metros de altura en todo el litoral, incluso superiores a los 3 metros en el litoral central.

Aparte del viento de componente este que sopló con rachas fuertes a lo largo del día, también se observaron algunas vientos fuertes asociadas a las tormentas, como es el caso de Mont-Roig del Camp (Tarragona), donde un pequeño tornado causó desperfectos.

La predicción para las próximas horas indica que, aunque el temporal ya ha quedado atrás, aún habrá cierta inestabilidad atmosférica.

Según el SMC, la nubosidad será variable, e incluso compacta en la vertiente sur del Pirineo y del Prepirineo occidental, donde se esperan algunas precipitaciones débiles.

Además, de cara a la noche es posible algún chubasco en el sector central del litoral y del prelitoral, así como al sur de la Costa Brava.

El viento soplará entre flojo y moderado de componente sur, pero a pesar de ello la situación marítima continuará muy alterada, aunque con tendencia a amainar rápidamente, con olas que aún pueden superar los 2,5 metros y una notable mar de fondo del sur-este.

A partir del miércoles y durante lo que resta de semana, la situación meteorológica vendrá protagonizada por las altas presiones, lo que hará que los días sean mayoritariamente soleados, con temperaturas que irán en ascenso progresivo. De cara al próximo fin de semana el ambiente será incluso cálido durante las horas centrales del día.