Erasmus cumple 30 años con España como líder en recepción de estudiantes

Treinta años puede ser mucho o poco, según se mire. Pero al margen de la cifra, que una iniciativa dure con la reputación y el éxito intacto durante treinta años ya son palabras mayores. Y más si gracias a ella se ha viajado, se ha aprendido y se ha crecido personalmente.

Es el caso del programa Eramus. «Cuando nació en el año 1987, tan solo 95 estudiantes despegaron de España. De esos 95 pasamos a 48.000 personas», cuenta orgulloso Pablo Martín González, director del Servicio Español para la Internacionalización de la Educación (Sepie), el organismo que gestiona el programa Erasmus en España.

El Erasmus tiene tantos significados y momentos vividos como personas lo experimentaron. Pero además, «es el buque insignia de Europa, la manifestación más clara de lo que es el continente», asegura Martín González.

De hecho, ni el «Brexit» ha podido con él. Uno de los acontecimientos políticos más relevantes para Europa no ha conseguido hacer mella en este programa de intercambio. «Para participar en Erasmus no es necesario ser miembro de la Unión Europea. Aún así, habrá que esperar el resultado de la negociación entre Europa y Reino Unido, pero mientras tanto, sigue como hasta ahora. Además, nos consta que las instituciones británicas quieren seguir participando».

El Erasmus ya no es solo europeo

Un total de 9 millones de personas se han beneficiado de este programa desde su nacimiento. Conforme pasaron los años, con la fama que adquiría y los resultados que daba, aparecieron programas paralelos que daban la oportunidad de viajar, no solo a los alumnos de educación superior, sino también de Formación Profesional, formación escolar y hasta adultos.

Con Erasmus Plus, concebido en 2014, los programas paralelos han ido desapareciendo para dar lugar al Erasmus más ambicioso: aparte de que viajan estudiantes de todos los niveles educativos, también lo hacen profesores. Además, los viajes ya no tienen solo objetivos académicos, también incluyen, entre otros, la cooperación o realización de proyectos deportivos, etc. Y, lo más importante, el Erasmus ya no es solo europeo. Aparte de los 33 países a los que se puede viajar (los 28 Estados Miembros más Turquía, Macedonia, Noruega, Islandia y Liechtenstein), «se puede ir a cualquier parte del mundo, desde Argentina, Chile, Ecuador, pasando por Togo, Sudáfrica hasta China o Taiwán», cuenta Martín González.

Y España, no solo tiene motivos para celebrar los treinta años de un programa del que forma parte desde su nacimiento, también porque ha estado siempre en el top de países que más personas ha enviado al exterior. «Históricamente, el país que más personas ha enviado es Alemania con un total de 650.000. Nosotros hemos sido el segundo con 625.000», especifica el director del Sepie.

Y por si esto fuera poco, en 2014, hemos sido número uno en recepción de estudiantes (más de 68.000 alumnos y profesores han llegado a nuestro país) y compartimos podio con Francia y Alemania en envío. «España está en el top porque es un país muy acogedor, tenemos una política de estudiantes internacionales muy buena y es fácil integrarse aquí. Además, en cuanto a educación superior, la calidad del sistema universitario está muy bien, en España nadie se siente extraño», concluye Martín González.

Con motivo de los 30 años, la Comisión Europea ha celebrado un acto en el que el presidente, Jean-Claude Juncker aseguró que «Cada euro que invirtamos en Erasmus+ es una inversión en el futuro, en el futuro de un joven y de nuestra idea europea. No puedo imaginar nada más digno que invertir en nuestros líderes de mañana».

14.700 millones de euros

Además, se anunció la creación de una aplicación móvil con la que se podrá hacer un seguimiento del progreso de los diferentes pasos administrativos antes, durante y después de su estancia en el extranjero o mejorar sus conocimientos lingüísticos a través de un enlace directo a la plataforma « Erasmus+Online Linguistic Support», que ofrece cursos en línea tutorizados o guías interactivas en directo.

Desde 2014 y hasta el año 2020 la Comisión Europea va a destinar mas de 14.700 millones de euros para este programa. Y en el caso de España, este año, se destinarán de 178 millones de euros incluyendo 29 aportados por el Ministerio de Educación. «Desde 2014 se mejoró la aportación económica, se ha incrementando un 40 por ciento respecto al programa previo, y el año pasado apostamos por las personas con dispcacidad a las que se les dobló las ayuda. Además, para los de educación superior, la ayuda pasó de 100 a 175 euros», señala Martín González.