Narcotráfico | cádiz
«Kiko 'El Cabra' imploraba: '¿Cómo voy a hacer yo algo así?... ¡me echaría todo encima!'»
NARCOTRÁFICO
El hasta ahora máximo implicado en el asesinato de los guardias civiles en Barbate se encuentra «más relajado» como el resto de detenidos tras el informe de la UCO que los ha desvinculado del ataque
La nueva versión desmonta otra acerca de si 'El Cabra' pudo actuar por venganza por la muerte de un narco al chocar contra una patrullera en Chipiona: «No eran amigos, se conocían de La Línea, como todos ellos», comenta una fuente
La Guardia Civil descarta que la narcolancha del 'Cabra' matara a los agentes de Barbate
El resultado continúa siendo el mismo: dos guardias civiles, Miguel Ángel y David, han muerto de manera violenta en acto de servicio arrollados por una lancha de narcos y otros cuatro compañeros resultaron heridos y con unas secuelas imborrables. El objetivo: encontrar a quien o quienes lo hicieron a lo que se están dedicando los investigadores y los instructores de la causa desde el primero momento que ocurrieron los hechos.
Y, como es sabido y en base a diferentes indagaciones, se detuvo a seis personas a los que la acusación señaló -en este primer momento procesal- como los autores de este ataque mortal. Todos ellos fueron acusados de dos delitos de asesinato, cuatro de asesinato en tentativa, además de contrabando, pertenencia a organización criminal, atentado y lesiones. Y tras pasar a disposición judicial en el juzgado de Barbate fueron enviados a prisión provisional. Ahí continúan todos a la espera de las decisiones que se adopten sobre su puesta en libertad o su continuidad en la cárcel como medida cautelar.
Entre ellos, Kiko 'El Cabra', el vecino de La Línea y experto piloto de lanchas que tras su detención admitió que estaba en el puerto de Barbate cuando ocurrió la brutal agresión pero que no era él quien iba a los mandos ni su 'goma' la implicada.
Los ocupantes de la narcolancha tenían la intención «clara e inequívoca» de causarles un «grave daño» o «quitarles la vida» a los guardias civiles
El informe de la UCO desvela varias claves; entre ellas, que la embestida no fue un movimiento de protección de la embarcación porque «no portaba droga, ni petacas de gasolina, ni migrantes», sino que resultó un ataque a los agentes
Según declaró aquella noche había mucho temporal y se tuvieron que «refugiar en Barbate». Habían salido sobre las tres de la tarde de Sanlúcar. Pero, siempre como indica la versión de las defensas y lo manifestado ante el juez, negaron su implicación en la fatal embestida. «Cuando los detuvieron Kiko imploraba: '¿Cómo voy a hacer yo eso?... me echaría todo encima'», recuerdan fuentes próximas. Al parecer se refería a atacar de esa manera tan violenta a la Guardia Civil y también a lo que supone la presión de un hecho así para el resto de personas que se dedican de una o de otra forma al narcotráfico.
En este sentido, algunas fuentes desmienten que el piloto linense actuará por tanto «por venganza» tras la muerte de un 'petaquero' en la desembocadura del Guadalquivir tras colisionar contra una patrullera de la Guardia Civil. «Eso ha sido una fábula. No eran amigos. Se conocían de La Línea pero como se conocen todos estos».
Por otro lado, y según ha podido saber este periódico, los seis acusados se encuentran «más relajados», «más tranquilos» tras conocer que sobre ellos posiblemente -a no ser que haya nuevos giros en la investigación- pesen los delitos de asesinato. Todos continúan repartidos en diferentes cárceles de Andalucía.
